En Perú, la anemia es un desafío significativo para la salud pública, que afecta a un elevado número de niños. Esta enfermedad, que altera los niveles de hemoglobina en la sangre y puede influir de forma adversa en el desarrollo infantil, supone un riesgo especial para aquellos menores con recursos limitados.
Según cifras del Gobierno peruano, cerca de 700 mil bebés, equivalentes al 40,9% de los niños entre 6 y 35 meses de edad, tienen anemia. El Ministerio de Salud (Minsa) señaló que, gracias al trabajo conjunto con la Dirección Regional de Salud, el índice de anemia en niños menores de 3 años en la región Puno se redujo en 3.2% durante el 2022.
¿Qué es exactamente la anemia infantil?
La anemia infantil es un trastorno sanguíneo que afecta los niveles de glóbulos rojos en la sangre, y se ha convertido en un problema serio para la salud de los niños. La importancia de los glóbulos rojos son esenciales porque suministran oxígeno al cuerpo; su deficiencia puede provocar síntomas como debilidad, fatiga y, de manera notable, palidez en la piel de los pequeños.
Uno de los aspectos más preocupantes es que esta afección puede ser el inicio de la desnutrición infantil, amenaza que resulta fatal para aproximadamente 8,500 niños diariamente a nivel global. La deficiencia en la ingesta de hierro y vitamina B12 se erige como la principal causa de anemia en la población infantil. Alimentos fundamentales como legumbres, carnes rojas y espinacas, no están ofreciendo la nutrición requerida, llevando a una insuficiencia proteica.
Las deficiencias nutricionales que derivan en anemia comprometen el desarrollo cognitivo y neuronal de los niños, especialmente en el periodo crítico de cero a tres años, esencial para el crecimiento de su sistema nervioso. Es imperativo que padres y cuidadores garanticen que los niños mantengan una alimentación adecuada desde sus primeros años, ya que esto repercutirá directamente en su salud y desarrollo.
¿Cuáles son las graves repercusiones de tener anemia?
La anemia es una condición que afecta significativamente a los niños en edad escolar, comprometiendo sus habilidades cognitivas y su capacidad de aprendizaje en comparación con sus pares sanos. Esta condición les hace más propensos a infecciones y a un sistema inmunológico debilitado.
Los niños con anemia enfrentan desafíos en el desarrollo de habilidades psicomotoras y sociales. Una nutrición inadecuada impide su adecuado desarrollo cerebral, resultando en dificultades de concentración y atención. Durante el día, su nivel de energía se ve mermado y la fatiga se manifiesta.
En el ámbito médico, estos niños no siempre reciben la misma atención que aquellos sin la condición, afectando su calidad de vida diaria. En el contexto educativo, su rendimiento académico puede ser inferior en las etapas iniciales debido al impacto de la anemia en sus cerebros en desarrollo. Por ello, es crucial abordar la prevención de la anemia desde edades tempranas.
Por otro lado, la anemia durante el embarazo puede tener consecuencias graves, incrementando el riesgo de partos no planificados, mortalidad materna y neonatal, bajo peso al nacer, parto prematuro y retraso en el crecimiento fetal. La ingesta de suplementos de hierro durante esta etapa se postula como una medida esencial para combatir estos efectos adversos.
Tipos de anemia
De acuerdo con expertos en salud, esta enfermedad puede manifestarse en diversas formas, todas con consecuencias significativas para la salud infantil.
Anemia causada por la pérdida de hierro
La anemia por deficiencia de hierro es una de las más comunes en la infancia. Surge debido a la falta de este esencial mineral en la alimentación diaria. Los especialistas alertan sobre las críticas consecuencias de la deficiencia de hierro, que, en casos extremos, puede provocar hemorragias internas en el sistema digestivo de los menores.
Anemia hemolítica
Aunque es menos común, la anemia hemolítica es igualmente preocupante. Se origina debido a un trastorno genético que provoca una destrucción anormal de los glóbulos rojos en el organismo infantil. A pesar de que los síntomas pueden ser diversos, su impacto negativo en la salud es innegable.
Anemia por deficiencia de vitamina B12
Esta forma de anemia se presenta en niños con una dieta carente de fuentes adecuadas de vitamina B12. Se relaciona con una alimentación poco saludable, marcada por la escasa ingesta de alimentos como hígado, carne, queso y huevos, y puede repercutir gravemente en el desarrollo infantil.