Aunque la cultura cafetera en el país viene en aumento, todavía estamos lejos en comparación a otros países. Aprovechando que agosto es el mes del café peruano, Villa Rica, la tierra del café más fino del mundo, busca incentivar el consumo de este grano trayendo sus mejores productos a la capital.
Por este motivo, se llevará a cabo el Expocafé Villa Rica entre el jueves 24 al domingo 27 de agosto en el Parque de la Exposición. En esta feria, que tiene como aliado principal a la Municipalidad Metropolitana de Lima, los asistentes podrán degustar del café de excelencia que se produce en este distrito, el mismo que viene siendo exportado con gran éxito a varios países. De hecho, el 80% del café que se produce en el distrito se va a Europa, Estados Unidos y ha ingresado a Asia con muy buena aceptación.
En la Expocafé habrá 40 stands que llevarán sus mejores granos. En esta feria se podrá encontrar café de especialidad desde los 84 puntos en taza hasta los 91.5, lo que se conoce como cafés presidenciales. Asimismo, se podrá encontrar productos derivados del café, lácteos, embutidos, miel de abeja y derivados, chocolates, así como artesanías de las tres culturas que cohabitan en Villa Rica: Yánesha, Austroalemana y Andina. Y como no podía ser de otra manera, no faltará la tradicional Danza del Café.
Johnny Vargas, alcalde de la Municipalidad Distrital de Villa Rica, resalta que esta localidad es pionera en producción de café de calidad y, siendo acreedor de la quinta denominación de origen, es catalogada como referencia de producción cafetalera a nivel nacional.
“Hablamos de un 90 a 95% de la población que se dedica a la producción de café y justamente es por ello que es tan importante esta actividad. Esperamos que tengamos la mayor cantidad de visitantes, porque nuestro reto es mejorar el consumo per cápita a nivel nacional, que es de 1.4 kg, frente a otros países que tienen 13 o 16 kg”, afirma la autoridad.
Resalta que detrás de cada taza de café hay una historia de esfuerzo de muchas familias que durante varias generaciones se han dedicado a la producción. Y es precisamente este atributo lo que los convierte en referencia en la caficultura a nivel nacional. En Villa Rica, la producción de café es la principal actividad económica, seguida del turismo.
Qué hace especial al café de Villa Rica
Ever de la Cruz Montoya, presidente de la Cámara de Turismo, Producción, Ecología y Cultura del distrito de Villa Rica, señala que por el microclima que tienen, y una altitud que varía entre 1.200 y 2.200 metros de altura sobre el nivel del mar, permite que cada productor obtenga una diversidad de variedades de café.
“El café de Villa Rica va a tener infinidad de perfiles, al momento de procesar y consumirlo se puede percibir que un café tiene sabores a piña, a melocotón, a aguaymanto, mangos, manzanas, yogures, infinidad de sabores que puedes obtener. No por nada somos conocidos como la tierra del café más fino del mundo”, señala.
De la Cruz recomienda que los cafés de especialidad sean extraídos a través de métodos, como el chemex, V60 o la prensa francesa; y con una buena calibración se puede consumir en espresso. También señala que está creciendo mucho el consumo en bebidas frías. “Se piensa que el café solo se debería consumir caliente, pero realmente si eres amante del café lo puedes consumir todo el año, en frappé o cold brew”, precisa.
Según datos del 2022, el año pasado se exportó un aproximado de 3.800 toneladas de café, siendo el principal mercado el europeo, llegando a Bélgica, Suiza y Alemania. Luego está el mercado norteamericano con Estados Unidos y Canadá para los cafés de especialidad. Y los de mayor puntaje se envían al mercado asiático, como Corea, Japón y China.
Zona turística
El alcalde Vargas espera que los visitantes al Expocafé puedan llevarse un pedacito de Villa Rica, pero también espera que los visiten, ya que son un pueblo muy acogedor. El distrito se viene consolidando como un destino turístico, con un clima agradable todo el año y una altitud de 1.450 metros, con los parajes típicos que ofrece la vistosa ceja de selva.
Recordemos que se encuentran dentro de la Reserva de Biosfera Oxapampa - Asháninka - Yánesha (BIOAY), que pone en valor lo que allí se produce, a la vez que marca la senda para un desarrollo armónico entre las poblaciones locales y el medio ambiente. Además, han sido catalogados como Bosque Modelo desde el año 2017.