42% de niños de 6 a 35 meses padecen de anemia en el Perú: cifra alerta y se temen graves consecuencias

El impacto de la anemia en la salud y el desarrollo de los niños durante los primeros años de vida es incuestionable. Esta enfermedad afecta directamente el desarrollo cerebral de los menores, lo cual resuena en su capacidad cognitiva y, por ende, en su desempeño escolar y social.

Lamentablemente, los resultados que arroja la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes) del 2022 revelan una preocupante realidad: la tasa de anemia en niños y niñas entre 6 y 36 meses aumentó del 38.8 % al 42.4 %.

El incremento de la anemia se observó tanto en el ámbito urbano como en el rural. En las áreas urbanas, el porcentaje aumentó del 35.3 % al 39 %, mientras que en las zonas rurales se elevó del 48.7 % al 51.5 %. Estas cifras reflejan un panorama alarmante para el bienestar de los niños en todo el país.

Al analizar los datos a nivel departamental, solo siete regiones experimentaron una disminución en la tasa de anemia en niños entre 6 y 36 meses. Estas regiones son Moquegua, Arequipa, Ica, Puno, Cusco, Junín y Áncash. Sin embargo, a pesar de algunos avances, casos alarmantes persisten en lugares como Cusco y Puno, que aún registran tasas de anemia por encima del 50 %.

En particular, Puno continúa siendo el departamento con el mayor porcentaje de anemia, con un preocupante 67.2 %. Además, se identificaron otros departamentos donde la anemia aumentó significativamente, como Huánuco, Loreto, Huancavelica, Pasco, Tacna y San Martín.

La gravedad de la situación se ve agravada por el hecho de que el programa principal para abordar la anemia, el Programa Articulado Nacional (PAN), experimentó una reducción en su presupuesto.

Mientras que en el año 2022, el PAN contó con un presupuesto de S/ 1,285.6 millones, pero solo se ejecutaron S/ 1,013.7 millones, lo que equivale al 78.9 % del presupuesto asignado. Estas cifras son preocupantes, ya que representan una disminución en comparación con años anteriores.

Anteriormente, el PAN había tenido un mayor presupuesto y un mejor rendimiento. Antes de la pandemia, en 2019, el programa contaba con un presupuesto de S/ 2,845 millones y logró ejecutar el 91.8 % de esos recursos.

El incremento de la anemia en infantes de 6 a 36 meses está influenciado por varios factores que generan un impacto en la tanto de la disponibilidad como del acceso a alimentos nutritivos. Estos factores son:

• Pobreza

La desnutrición y la anemia están determinadas en gran medida por la pobreza. El acceso a alimentos ricos en hierro y otros nutrientes necesarios es difícil para las familias con recursos económicos limitados. El acceso a la atención médica y a los programas para prevenir y tratar la anemia también puede verse obstaculizado por la pobreza.

• Desigualdad económica

La desigualdad económica en algunas regiones puede acentuar las disparidades en la prevalencia de la anemia. Las comunidades más pobres y marginadas tienen menos oportunidades de acceder a alimentos llenos de nutrientes, servicios de salud de calidad y programas de intervención. Esto contribuye a un riesgo de anemia en estos grupos.

• Acceso limitado a servicios de salud

El acceso a servicios de salud, incluyendo la detección y tratamiento de la anemia, puede estar restringido en áreas con recursos limitados. La falta de una buena infraestructura de salud, personal capacitado y medicamentos adecuados puede dificultar la prevención sobretodo en las comunidades rurales y de bajos ingresos.

Ninguna Dirección Regional de Salud (DIRESA) logró superar el umbral del 40 % de prevalencia de anemia. La DIRESA Huancavelica registró el valor más alto, con un 38,4 %, seguida de la DIRESA Ancash con un 35,8% . Al analizar la situación, se observa que la proporción de anemia disminuye a medida que aumenta la edad de los niños, siendo el grupo de 12 a 23 meses el que presenta la proporción más alta de anemia, alcanzando el 31,7 %.