En el primer mes de 2023, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Lima Metropolitana alcanzó a 0.23%, la más baja de los últimos 12 meses, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), y fue el ritmo por debajo de lo esperado por el mercado (0.51% según sondeo de Bloomberg).
Sin embargo, ello no evitó que la trayectoria anual de la inflación en la capital del Perú continúe subiendo, pasando de 8.46% en diciembre a 8.66% en enero, en momentos que el país andino vive tensiones políticas y sociales, mientras se lucha contra la inflación más alta en un cuarto de siglo.
El informe técnico ‘Variación de los Indicadores de Precios de la Economía’ del INEI señala que, el avance de la inflación mensual se debió principalmente a los mayores costos de alimentos y bebidas no alcohólicas (0.67%), así como al alza en los precios de hoteles y restaurantes (0.53%); no obstante, la disminución de los costos de transporte compensó parcialmente esos aumentos.
Inflación a nivel nacional
A raíz de las protestas sociales y bloqueos de carreteras en el sur del país ha impactado que varios productos, en particular los agrícolas, carnes y combustibles suban de precios en enero.
En ese sentido, el INEI informó que el IPC a nivel nacional aumentó un 0.46% en el primer mes del año, con lo cual la inflación anual que acumulan las regiones del Perú se ubicó en 8.9%.
Las variaciones más altas en regiones se reportaron en Puerto Maldonado (6.13%), básicamente por el incremento de los combustibles para el transporte y para el hogar; Puno (2.96%), Moquegua (2.19%), Abancay (1.64%), Tacna (1.39%) y Cusco (1.25%).
Ante estas cifras, BBVA Research señaló que las renovadas presiones al alza que se observan en los últimos meses sobre los precios de algunos alimentos explican buena parte de esta resistencia, las que responden por ejemplo a la escasez de lluvias en algunas zonas del país, a los elevados precios de los fertilizantes en 2022 (o el disminuido acceso a este insumo) y, de manera más reciente, a las dificultades para abastecer a los mercados en un contexto en que vías de transporte importantes vienen sufriendo bloqueos.
Por otra parte, la entidad bancaria indicó que la inflación subyacente (que excluye los precios de alimentos y energía), una medida más tendencial del ritmo al que avanzan los precios, se ubicó en enero en 0.05% (diciembre 2022: 0.54%). Con ello, este indicador de inflación aumentó en términos interanuales, pasando de 5.6% en diciembre de 2022 a 5.8% en enero.
“Continúa así en niveles elevados, alejada del rango meta del BCR, y, por lo menos de momento, sin señales claras de que empieza a revertir”, precisó BBVA Research.
Asimismo, la entidad bancaria estima que la inflación interanual seguirá mostrando altos niveles en el corto plazo, incluso por encima de 8.0%. Los disturbios que persisten en el país y que afectan el normal abastecimiento de alimentos a los mercados, así como el impacto rezagado de la escasez de lluvias y de los elevados precios de los fertilizantes apuntan en ese sentido. Tomando en cuenta también que las expectativas inflacionarias para 2023 se ubican por encima de 4% (y de 3% para 2024), y a pesar del débil avance de la actividad económica del Perú.
Perspectivas del MEF
Si bien, la inflación estuvo por debajo de lo estimado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el titular de dicha cartera Alex Contreras indicó que la inflación anual probablemente se dispararía por encima del 8,8% en enero después de que las protestas y los bloqueos de carreteras hicieran subir los precios de los alimentos.
El ministro añadió que el alza sería temporal debido a las medidas de estímulo que proponía el Gobierno para las regiones afectadas por las manifestaciones, donde ciudadanos exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso y adelanto de elecciones generales.
Expectativa del BCR
Estas nuevas cifras abren la posibilidad de que el Banco Central de Reserva (BCR) del Perú evalúe una primera pausa en el ciclo de alza de tasas, aunque un aumento de 25pbs, a 8%, para la próxima reunión del 9 de febrero.
“No sorprendería, pues ya había sido descontado por el mercado. La inflación mayorista alcanzó 0.39% en enero, con lo que la trayectoria interanual también subió, de 8.6% a 8.9%”, analizó el Departamento de Estudios Económicas de Scotiabank.
El último aumento de 25 puntos básicos, a 7.75%, ocurrió en enero, cuando el BCR señaló que se proyectaba una tendencia a la baja en la inflación a partir de marzo y un regreso al rango objetivo en el cuarto trimestre de 2023.