El cuidado de la salud es primordial, las revisiones constantes y el seguimiento a cualquier síntoma por menor que sea no debe dejarse para después.
Hoy abordaremos dolor anal, cuáles son sus causas y en qué momento acudir a una clínica, de acuerdo con información de Mayo Clinic, una reconocida organización sin fines de lucro especializada en salud.
Se trata de un dolor que afecta la zona del ano, así como el recto, y que llega a ser una afección frecuente.
Si bien la mayoría de las causas del dolor anal son benignas, puede ser intenso por la gran cantidad de terminaciones nerviosas en la región perianal. La mayoría de las enfermedades que provocan este malestar también pueden ocasionar sangrado rectal, lo que podría significar un padecimiento más grave.
Mayo Clinic señala que las causas del dolor anal suelen poder diagnosticarse con facilidad. En general, se puede tratar con analgésicos de venta libre y baños con agua caliente.
Que puede causar dolor en el ano
Estas son algunas de las causas del dolor anal:
- Cáncer de ano
- Fisura anal (un pequeño desgarro en la mucosa del conducto anal)
- Fístula anal (un canal anómalo entre el ano o el recto, por lo general, hacia la piel cerca del ano)
- Picazón anal (pruritis del ano)
- Sexo anal
- Constricción anal o rectal (estrechamiento que puede producirse debido a las cicatrices, a una gran inflamación o al cáncer)
- Estreñimiento
- Enfermedad de Crohn
- Diarrea (causa la irritación del ano)
- Retención fecal (una masa de heces duras en el recto debido al estreñimiento crónico)
- Verrugas genitales
- Hemorroides (venas hinchadas e inflamadas en el ano o el recto)
- Síndrome del elevador del ano (espasmos en los músculos que rodean el ano)
- Absceso perianal (pus en el tejido profundo alrededor del ano)
- Hematoma perianal (una acumulación de sangre en el tejido perianal causada por la rotura de una vena, a veces denominada «hemorroide externa»)
- Proctalgia fugaz (dolor transitorio debido a espasmos del músculo rectal)
- Proctitis (inflamación de la mucosa del recto)
- Síndrome de úlcera rectal solitaria
- Coxidinia o coxigodinia (dolor de cóccix)
- Hemorroide trombosada (coágulo de sangre en una hemorroide)
- Traumatismo
- Colitis ulcerosa (un tipo de enfermedad intestinal inflamatoria)
- Proctitis ulcerosa (un tipo de enfermedad intestinal inflamatoria)
Qué hacer cuando hay dolor en el ano
Cuando se presenta el dolor anal se debe acudir al médico de forma inmediata o a una sala de urgencia si se manifiesta lo siguiente:
- Importante cantidad de sangrado rectal o sangrado rectal que no cesa, especialmente si está acompañado por aturdimiento, mareos o sensación de desmayo
- Dolor anal que empeora, se expande o está acompañado de fiebre, escalofríos o secreción
Programa una visita con un médico
Se debe pedir una consulta con el médico si el dolor dura más de unos días y si las medidas de cuidado personal no están ayudando. También si el dolor anal está acompañado de un cambio en el hábito intestinal o de sangrado rectal.
Una hemorroide que se manifiesta rápidamente o que es particularmente dolorosa puede haber desarrollado un coágulo sanguíneo en el interior. La extracción del coágulo dentro de las primeras 48 horas generalmente es lo que permite el máximo alivio, por lo que es importante solicitar una consulta con el médico a tiempo.
El coágulo sanguíneo de una hemorroide trombosada, si bien es doloroso, no puede desprenderse y viajar a otras partes del cuerpo, por lo que no causará ninguna otra complicación.
Consulta al médico si tienes sangrado rectal, particularmente si tienes más de 40 años, para descartar enfermedades poco frecuentes pero graves, como el cáncer de colon.
Cuidado personal
Según la causa de tu dolor anal, hay algunas medidas que puedes adoptar en casa para aliviar el dolor. Algunos de ellos son:
- Comer más frutas, vegetales y granos enteros, hacer ejercicio diariamente y tomar ablandadores de heces, si es necesario, para facilitar el movimiento intestinal, reducir el esfuerzo al evacuar y aliviar el dolor
- Sentarse dentro de una bañera con agua caliente hasta la cadera (conocido como «baño de asiento») varias veces al día para aliviar el dolor producido por las hemorroides, fisuras anales o espasmos del músculo rectal
- Aplicar una crema de venta libre para las hemorroides o crema de hidrocortisona para las fisuras anales
- Tomar analgésicos de venta libre para aliviar el dolor como paracetamol (Tylenol, otros), aspirina o ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros)