El pie plano es una afección común, en la que los arcos de la parte interna del pie se aplanan cuando se ejerce presión sobre ellos. Cuando las personas con pie plano se ponen de pie, el pie se orienta hacia afuera y toda la planta del pie cae y toca el piso.
El pie plano se puede producir cuando los arcos no se desarrollan durante la niñez. También puede manifestarse más adelante en la vida después de una lesión o por el simple desgaste natural de la edad.
Por lo general, el pie plano no causa dolor. Si no sientes dolor, no se requiere tratamiento. Sin embargo, si el pie plano te causa dolor y limita lo que deseas hacer, entonces se puede justificar una evaluación de un especialista.
Síntomas
La mayoría de las personas no presenta síntomas asociados con el pie plano. Sin embargo, algunas personas sufren dolor de pie, en especial en el talón o en la zona del arco. El dolor puede empeorar con la actividad. Puede producirse hinchazón a lo largo de la parte interna del tobillo.
Cuándo debes consultar al médico
Consulta con el proveedor de atención médica si tú o tu hijo presentan dolor en los pies, sobre todo, si este limita las actividades que desean hacer.
Factores de riesgo
Entre los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer pie plano se incluyen los siguientes:
Obesidad
Lesión en el pie o el tobillo
Artritis reumatoide
Envejecimiento
Diabetes
Diagnóstico
Para ver la mecánica de tus pies, el proveedor de atención médica los observará de adelante y de atrás y te pedirá que te pares en puntas de pie. De esta forma, evaluará la fuerza en los tobillos e identificará el área de dolor principal. El patrón de desgaste del calzado también puede revelar información sobre tus pies.
Pruebas
Entre las pruebas por imágenes que pueden ser de ayuda en el diagnóstico de la causa del dolor de pie, se pueden incluir las siguientes:
Radiografías. Una radiografía simple utiliza una pequeña cantidad de radiación para generar imágenes de los huesos y las articulaciones de los pies. Es particularmente útil para evaluar la alineación y detectar artritis.
Tomografía computarizada . Esta prueba toma radiografías del pie desde diferentes ángulos y proporciona mucho más detalle que una radiografía estándar.
Ecografía. Es posible que se utilice una ecografía si se sospecha que existe una lesión en el tendón. La ecografía utiliza ondas de sonido para generar imágenes de los tejidos blandos dentro del cuerpo.
Imágenes por resonancia magnética . Por medio de ondas de radio y un imán potente, las imágenes por resonancia magnética proporcionan un detalle minucioso del hueso y los tejidos blandos.
Tratamiento
No es necesario hacer ningún tratamiento para el pie plano si no causa dolor.
Terapias
Para el pie plano doloroso, el proveedor de atención médica puede sugerir lo siguiente:
Plantillas ortopédicas (dispositivos ortopédicos). Las plantillas ortopédicas de venta libre pueden ayudar a aliviar el dolor que causa el pie plano. A veces, se recomiendan las plantillas ortopédicas diseñadas a medida que se moldean según el contorno del pie. Las plantillas ortopédicas no curan el pie plano, pero suelen reducir los síntomas.
Ejercicios de estiramiento. Algunas personas con pie plano también tienen el tendón de Aquiles acortado. Los ejercicios para estirar este tendón pueden ayudar.
Fisioterapia. En el caso de algunos corredores, el pie plano puede contribuir a las lesiones por sobrecarga. Un fisioterapeuta puede proporcionar ejercicios para fortalecer los músculos y tendones del pie y ofrecer orientación para mejorar la marcha.
Cirugía
La cirugía no se realiza solo para corregir el pie plano, sino que también puede ser una opción cuando los pacientes continúan sufriendo un dolor que limita sus actividades después de haber probado tratamientos no quirúrgicos. Además, con la cirugía, se pueden reparar los problemas de huesos y tendones que les provocan dolor.