Enfermedad de Kawasaki: causas, síntomas y tratamiento

Hay enfermedades que no presentan síntomas, por lo que es importante llevar una vida saludable y hacer revisiones constantes al médico

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Existen distintos métodos para diagnosticar esta enfermedad (Infobae/Jovani Pérez)
Existen distintos métodos para diagnosticar esta enfermedad (Infobae/Jovani Pérez)

La enfermedad de Kawasaki causa en los niños hinchazón (inflamación) en las paredes de los vasos sanguíneos de tamaño pequeño a mediano que trasportan la sangre por todo el cuerpo. Esta enfermedad suele provocar la inflamación de las arterias coronarias, que suministran sangre oxigenada al corazón.

La enfermedad de Kawasaki anteriormente se denominaba síndrome de los ganglios linfáticos mucocutáneos porque también provoca la hinchazón de los ganglios (ganglios linfáticos) y de las membranas mucosas dentro de la boca, la nariz, los ojos y la garganta.

Los niños que la padecen pueden tener fiebre alta, manos y pies hinchados con descamación de la piel y ojos y lengua rojos. Sin embargo, la enfermedad de Kawasaki suele ser tratable y la mayoría de los niños se recupera sin presentar problemas graves, en caso de recibir tratamiento en los 10 días posteriores a la aparición.

Síntomas

Para que se diagnostique la enfermedad de Kawasaki, los niños generalmente deben presentar fiebre superior a 102,2 °F (39 °C) durante cinco días o más y al menos cuatro de los siguientes signos y síntomas.

Sarpullido en la parte principal del cuerpo o en la zona genital

Agrandamiento de un ganglio linfático del cuello

Ojos extremadamente rojos sin una secreción espesa

Labios rojos, secos y agrietados y lengua extremadamente roja e hinchada

Piel roja e hinchada en las palmas de las manos y en las plantas de los pies, con posterior descamación de la piel de los dedos de las manos y de los pies

Es posible que los síntomas no se presenten al mismo tiempo, por lo que es importante informar al proveedor de atención médica de tu hijo sobre algún signo o síntoma que ya desapareció.

Otros signos y síntomas que pueden desarrollarse incluyen los siguientes:

Dolor abdominal

Diarrea

Irritabilidad

Dolor articular

Vómitos

Los niños que presentan fiebre alta durante cinco días o más y menos de cuatro de los signos y síntomas anteriores podrían tener lo que se conoce como enfermedad de Kawasaki incompleta. Los niños con enfermedad de Kawasaki incompleta siguen teniendo riesgo de sufrir lesiones en las arterias coronarias y aún requieren tratamiento dentro de los 10 días posteriores a la aparición de los síntomas.

Esta enfermedad puede presentar síntomas similares a los del síndrome inflamatorio multisistémico en niños, el cual se produjo a nivel mundial en los niños que padecieron la COVID-19. Es probable que los niños con estos síntomas también se sometan a pruebas de la COVID-19.

Cuándo consultar al médico

Si tu hijo tiene fiebre que dure más de tres días, comunícate con su proveedor de atención médica. El tratamiento de la enfermedad de Kawasaki dentro de los 10 días posteriores a su inicio puede reducir en gran medida las probabilidades de daño duradero en las arterias coronarias que abastecen al músculo cardíaco.

 Ante cualquier malestar lo mejor es acudir al médico (Archivo)
Ante cualquier malestar lo mejor es acudir al médico (Archivo)

Factores de riesgo

Se sabe de tres factores que aumentan el riesgo de que un niño tenga la enfermedad de Kawasaki.

Edad. Los niños menores de 5 años son los que tienen mayor riesgo de contraer la enfermedad de Kawasaki.

Sexo. Los niños son un poco más propensos que las niñas a tener la enfermedad de Kawasaki.

Origen étnico. Los niños de ascendencia asiática o de las islas del Pacífico, como los japoneses o los coreanos, tienen tasas más altas de enfermedad de Kawasaki.

La enfermedad de Kawasaki tiende a darse en determinadas estaciones. En América del Norte, suele darse en invierno y a principios de la primavera.

Diagnóstico

No hay pruebas específicas disponibles para diagnosticar la enfermedad de Kawasaki. El diagnóstico implica descartar otras enfermedades que causan signos y síntomas similares, incluidas las siguientes:

Escarlatina, que es causada por bacterias estreptocócicas y resulta en fiebre, sarpullido, escalofríos y dolor de garganta

Artritis reumatoide juvenil

Síndrome de Stevens-Johnson, un trastorno de las membranas mucosas

Síndrome del choque tóxico

Sarampión

Ciertas enfermedades trasmitidas por las garrapatas, como la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas

El proveedor de atención médica hará una exploración física y solicitará exámenes de sangre y de orina para ayudar en el diagnóstico. Las pruebas podrían incluir las siguientes:

Análisis de sangre. Los análisis de sangre ayudan a descartar otras enfermedades y a revisar el recuento sanguíneo. Un recuento alto de glóbulos blancos y la presencia de anemia e inflamación son signos de la enfermedad de Kawasaki.

Electrocardiograma. Se colocan electrodos en la piel para medir los impulsos eléctricos de los latidos del corazón. La enfermedad de Kawasaki puede causar problemas con el ritmo cardíaco.

Ecocardiograma. Esta prueba utiliza imágenes de ultrasonido para mostrar el funcionamiento del corazón y puede ayudar a identificar problemas con las arterias coronarias.

 Cada enfermedad tiene una o varias formas de diagnosticarla para así detectarla y luego combatirla (UNAM)
Cada enfermedad tiene una o varias formas de diagnosticarla para así detectarla y luego combatirla (UNAM)

Tratamiento

Para reducir el riesgo de complicaciones a largo plazo, el proveedor de atención médica de tu hijo querrá comenzar el tratamiento para la enfermedad de Kawasaki tan pronto como sea posible, preferiblemente mientras tu hijo aún tenga fiebre. Los objetivos del tratamiento inicial son bajar la fiebre y la inflamación y prevenir el daño al corazón.

El tratamiento para la enfermedad de Kawasaki puede incluir lo siguiente:

Gammaglobulina. La infusión de una proteína inmunitaria (gammaglobulina) a través de una vena (por vía intravenosa) puede reducir el riesgo de problemas de las arterias coronarias. Esto ayuda a reducir la inflamación en los vasos sanguíneos.

Aspirina. Las dosis altas de aspirina pueden ayudar a tratar la inflamación. La aspirina también puede disminuir el dolor, la inflamación de las articulaciones y la fiebre. Es probable que la dosis de aspirina se reduzca una vez que la fiebre desaparezca durante 48 horas. El tratamiento con Kawasaki es una rara excepción a la regla que dice que la aspirina no debe administrarse a los niños. La aspirina se asoció con el síndrome de Reye, una afección poco común pero potencialmente mortal, en niños que se recuperan de la varicela o la gripe. A los niños con la enfermedad de Kawasaki se les debe dar aspirina solo bajo la supervisión de un proveedor de atención médica.

Debido al riesgo de complicaciones graves, el tratamiento inicial para la enfermedad de Kawasaki generalmente se administra en un hospital en donde los médicos pueden continuar controlando al niño.

Después del tratamiento inicial

Una vez que la fiebre baje, el niño podría necesitar tomar una dosis baja de aspirina durante al menos seis semanas, o por más tiempo si desarrolla un aneurisma de la arteria coronaria. La aspirina ayuda a prevenir la coagulación de la sangre.

Sin embargo, los niños que contraen gripe o varicela durante el tratamiento posiblemente deban dejar de tomar aspirina. El uso de la aspirina se ha vinculado con el síndrome de Reye, una afección médica poco común pero potencialmente mortal que puede afectar la sangre, el hígado y el cerebro de niños y adolescentes después de una infección viral.

Con tratamiento, el niño puede comenzar a mejorar poco después del primer tratamiento con gammaglobulina. Sin tratamiento, la enfermedad de Kawasaki dura aproximadamente 12 días. Sin embargo, las complicaciones cardíacas pueden durar más tiempo.

Supervisión de los problemas cardíacos

Si tu hijo tiene algún signo de problemas cardíacos, el proveedor de atención médica podría recomendar exámenes de seguimiento para controlar su salud cardíaca a intervalos regulares, a menudo entre 6 y 8 semanas después de que comenzó la enfermedad y luego nuevamente después de seis meses.

Si los problemas cardíacos continúan, es posible que lo remitan a un médico que se especialice en el tratamiento de enfermedades cardíacas en niños (cardiólogo pediátrico). El tratamiento de las complicaciones cardíacas relacionadas con la enfermedad de Kawasaki depende del tipo de afección cardíaca.

Esperar a la vacunación

Si a tu hijo le dieron gammaglobulina, es una buena idea esperar por lo menos 11 meses para que reciba una vacuna con virus vivos atenuados, como la vacuna contra la varicela o el sarampión, ya que la gammaglobulina puede afectar la eficacia de estas vacunas. Dile al proveedor de atención médica de tu hijo que tuvo la enfermedad de Kawasaki.

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