La alergia al sol es un concepto muy amplio. Incluye varias afecciones que hacen que se forme una erupción en la piel que pica después de la exposición a la luz solar o a otras fuentes de radiación ultravioleta (UV). La erupción polimorfa lumínica es el tipo más común de alergia al sol.
Algunas personas tienen alergia al sol de tipo hereditario. Otras solo manifiestan síntomas cuando los desencadena otro factor, como un medicamento o el contacto con determinadas plantas. Otros tipos de reacciones alérgicas al sol se producen por causas desconocidas.
Los casos leves de alergia al sol pueden desaparecer sin tratamiento. Las erupciones graves pueden tratarse con pastillas o cremas con esteroides. Si tienes una alergia grave al sol, es posible que debas adoptar medidas de prevención, como llevar ropa que te proteja del sol.
Síntomas
La apariencia de la piel con alergia al sol varía en gran medida según el color de la piel y de lo que provoca los síntomas. Entre los signos y síntomas, se incluye lo siguiente:
Picazón (prurito)
Escozor
Pequeños bultos que pueden fusionarse y formar manchas con relieve
Enrojecimiento de la zona expuesta
Ampollas o urticaria
Los síntomas suelen presentarse únicamente en la piel que se expuso al sol o a otras fuentes de luz ultravioleta . Los síntomas aparecen unos minutos o unas horas después de la exposición al sol.
Cuándo debes consultar con un médico
Consulta con tu proveedor de atención médica si tienes alguna reacción inusual y molesta en la piel después de la exposición al sol. En el caso de síntomas graves o persistentes, es posible que tengas que consultar con un médico especialista en el diagnóstico y tratamiento de trastornos de la piel (dermatólogo).
Factores de riesgo
Entre los factores de riesgo de tener una reacción alérgica a la luz solar se incluyen los siguientes:
El contacto con ciertas sustancias. Algunos síntomas de la alergia al sol se desencadenan cuando se expone la piel a una sustancia y luego a la luz solar. Las sustancias que con frecuencia son responsables de este tipo de reacción incluyen las fragancias, los desinfectantes y las sustancias químicas usadas en algunos protectores solares.
Tomar ciertos medicamentos. Varios medicamentos pueden hacer que tu piel se queme más rápidamente bajo el sol, como los antibióticos con tetraciclina, los medicamentos derivados de sulfas y los analgésicos, como el ketoprofeno.
Tener otra afección de la piel. Tener dermatitis aumenta el riesgo de padecer alergia al sol.
Tener un pariente consanguíneo con alergia al sol. Es más probable que tengas alergia al sol si tu madre, tu padre o un hermano también presentan este trastorno.
Diagnóstico
El proveedor de atención médica puede diagnosticarte alergia al sol observándote la piel. Es posible que debas someterte a algunas pruebas, como las siguientes:
Análisis de exposición a la radiación ultravioleta. Este examen, también llamado “fotoprueba”, se usa para ver cómo reacciona la piel a la luz de una lámpara especial. Esto puede ayudar a identificar el tipo de alergia al sol que tienes.
Prueba del fotoparche. Esta prueba muestra si la causa de la alergia al sol es una sustancia sensibilizadora que se aplica en la piel antes de la exposición solar. Durante la prueba, se aplican sobre la piel parches idénticos de varios desencadenantes comunes de la alergia al sol, por lo general, en la espalda. Al día siguiente, una de las zonas se expone a una dosis medida de rayos ultravioletas que provienen de una lámpara de luz solar. Si ocurre una reacción solo en la zona expuesta a la luz, probablemente tenga relación con la sustancia que se está analizando.
Análisis de sangre y muestras de piel. Es posible que el proveedor de atención médica te pida que te hagas estos análisis si los síntomas podrían deberse a una afección subyacente, como el lupus. Durante estos análisis, se toma una muestra de sangre o de piel (biopsia) que luego se examina en un laboratorio.
Tratamiento
El tratamiento para la alergia al sol depende del tipo que tengas y de los síntomas. Para los síntomas leves, es posible que necesites simplemente evitar el sol durante unos días.
Medicamentos
Las cremas con corticoides están disponibles en concentraciones de venta con y sin receta médica. Para una reacción grave, es posible que el proveedor de atención médica te indique tomar pastillas con corticoide bajo receta médica, como la prednisona, durante un breve período.
La hidroxicloroquina (Plaquenil), un medicamento contra la malaria, puede aliviar los síntomas de algunos tipos de alergias al sol.
Fototerapia
Si tienes una alergia al sol grave, es posible que el proveedor de atención médica te sugiera que vayas acostumbrando la piel a la luz del sol progresivamente cada año a medida que los días van siendo más largos. En la fototerapia, se utiliza una lámpara especial para iluminar con luz ultravioleta las áreas del cuerpo que, con frecuencia, están expuestas al sol. Por lo general, se hace varias veces a la semana durante varias semanas.