La Liga MX se enfrenta a una nueva controversia luego de que el exárbitro Felipe Ramos Rizo denunciara, a través de su cuenta oficial de X (antes Twitter), un supuesto caso de acoso sexual y laboral en la Comisión de Arbitraje.
Según Ramos Rizo, la árbitra Avril Herrera habría sido víctima de acoso por parte de tres integrantes de la Comisión, quienes contarían con el respaldo de altos mandos como Armando Archundia, Enrique Osses y Roberto Paredes para encubrir la situación.
El pasado 24 de diciembre, Ramos Rizo había advertido sobre problemas legales en la Comisión, señalando que existían demandas en proceso, quejas por acoso y presión para actuar con transparencia. “Entre demandas legales que están en proceso, otras por venir y dos quejas de acoso laboral, así las cosas en el arbitraje”, escribió en su momento. En su más reciente publicación, reveló que Avril Herrera, abanderada de tercera división, presentó una denuncia formal pero, según el exsilbante, la Comisión intenta silenciarla.
“Quieren taparlo, por instrucciones de Archundia y Osses quieren tapar la denuncia de la árbitra Avril Herrera por acoso por parte de tres árbitros. Terminaron intimidando a la chica, quien por denunciarlo se juega su carrera”, denunció Ramos Rizo. Estas declaraciones han generado una ola de indignación en la comunidad futbolística, que exige una investigación exhaustiva y justicia para la joven afectada.
El analista también hizo un llamado a apoyar a la árbitra y no permitir que los implicados salgan impunes. “No pueden permitir que esta tercia de pillos (Archundia, Osses y Paredes) que están empeñados en tapar este grave incidente se salgan con la suya. Apoyen a la chica, este tipo de situaciones no se pueden tapar”, añadió en su publicación.
Este caso ha puesto nuevamente bajo escrutinio la gestión de la Comisión de Arbitraje, especialmente en un entorno donde las denuncias por acoso sexual y laboral están siendo tomadas con mayor seriedad. Las acusaciones de Ramos Rizo también apuntan a una cultura de encubrimiento que podría afectar la credibilidad de las instituciones deportivas en México.
Hasta el momento, ni Armando Archundia ni Enrique Osses han emitido declaraciones sobre las acusaciones. Sin embargo, el caso ha despertado un debate público sobre la necesidad de fortalecer los mecanismos de denuncia y protección para las mujeres en el deporte.
Mientras las investigaciones continúan, la comunidad futbolística está atenta a las acciones que tomarán las autoridades. Organizaciones y grupos en defensa de los derechos laborales y de género han manifestado su apoyo a Avril Herrera, subrayando la importancia de garantizar su seguridad y justicia.
Ramos Rizo cerró su mensaje con un llamado a la transparencia: “El futbol mexicano no puede permitirse este tipo de casos. Es momento de actuar con seriedad y de garantizar un entorno seguro para todos sus integrantes”.