Luego de varios meses batallando contra un cáncer de páncreas, se ha dado a conocer que a sus 76 años, falleció el sueco, Sven-Göran Eriksson, entrenador que, de manera breve, tuvo un paso por el banquillo de la Selección Mexicana, mismo que formó parte del vasto mosaico de su carrera como uno de los estrategas más reconocidos a nivel internacional.
Si bien, su trayectoria con el Tricolor no fue del todo fructuosa, uno de los momentos que más dio de que hablar durante su gestión por el balompié mexicano se dio a las pocas semanas de haberse hecho oficial su llegada al combinado azteca; aunque resaltando que, irónicamente, no fue Eriksson quien protagonizó la controversia, pues todo se trató de un astuto actor logró engañar a todos haciéndose pasar por el timonel sueco.
Luego de que en junio del 2008, la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) anunciara la contratación de Eriksson como nuevo entrenador del Tri, tuvieron que pasar escasas semanas para que se diera la curiosa anécdota de su “doble”. Fue a mediados de julio (del 2008) cuando durante un entrenamiento de los Pumas en el Estadio Universitario México 68, una figura inesperada hizo su entrada: un hombre con la apariencia inconfundible de Sven-Göran, acompañado por dos mujeres y un guardaespaldas.
La sorpresa fue inmediata, y los periodistas presentes rápidamente dirigieron su atención hacia el supuesto entrenador. Con una calma que solo un actor experimentado podría mantener, este impostor se dirigió al área técnica y comenzó a conversar en inglés con Ricardo “Tuca” Ferreti, el entrenador del cuadro felino. La escena parecía tan real que nadie cuestionó la autenticidad del personaje.
Para rematar la jugada, el doble de Eriksson ofreció declaraciones a los medios, dejando a todos los presentes con la sensación de haber presenciado un momento histórico.
Pero la verdad pronto salió a la luz, cuando el verdadero timonel nórdico, quien se encontraba en Estados Unidos, aclaró que no había estado en México y que jamás daría entrevistas como la que su impostor había ofrecido. La revelación sacudió a la prensa y a la FMF, que rápidamente emitió un comunicado recordando a los 18 clubes que el estratega se encontraba en territorio estadounidense, evaluando a jugadores mexicanos que participaban en la Superliga contra equipos de la MLS.
Este incidente, que en su momento provocó desconcierto y risas por igual, es ahora una anécdota memorable en la historia del fútbol mexicano y del paso de Eriksson como director técnico de la Selección Mexicana