Alberto García, conocido en redes sociales como Don Beto y famoso por ser un ferviente seguidor de los Pumas, ha causado revuelo en el mundo digital al solicitar donaciones para cubrir los gastos de su asistencia a los partidos del equipo universitario. La situación se viralizó rápidamente en redes sociales, desencadenando una ola de críticas y burlas hacia el aficionado.
Don Beto, quien anteriormente se había ganado la simpatía de algunos seguidores del club por crear una nueva porra, publicó un video en TikTok en el que pedía apoyo económico.
En el video, el fiel seguidor universitario compartió el número de su cuenta bancaria, esperando recibir donaciones que le permitieran costear transporte, hospedaje y boletos para los encuentros de los Pumas. Sin embargo, la respuesta del público fue muy distinta a la esperada.
En lugar de apoyo, Don Beto recibió múltiples mensajes de desprecio y algunas donaciones simbólicas de tan solo un peso. Entre los comentarios más ofensivos se encontraban frases como “Don Beto hambreado”, “Chtpm don Beto”, “Viejo muerto de hambre”, y “Don Beto es un hambreado como sus Pumas”. Estos mensajes no solo atacaban a Don Beto, sino también al equipo que apoya, evidenciando un fuerte rechazo por parte de algunos internautas.
La polémica ha abierto un debate en redes sociales sobre la legitimidad de la solicitud de Don Beto. Mientras algunos lo acusan de “limosnear” o pedir dinero sin justificación, otros defienden su derecho a buscar apoyo para seguir a su equipo favorito. A pesar de las críticas, Don Beto se mantiene firme en su posición y continúa siendo una figura divisiva en el ámbito digital.
Este incidente no solo ha puesto en evidencia la dureza de las críticas en redes sociales, sino también cómo las acciones de los aficionados pueden polarizar a la comunidad deportiva. Don Beto, por su parte, no ha hecho declaraciones adicionales tras la ola de reacciones que ha generado, dejando en el aire la pregunta de si continuará buscando el apoyo de sus seguidores o si tomará otra dirección para seguir alentando a su equipo.
Por ahora, el aficionado de los Pumas se enfrenta a una situación compleja, en la que las redes sociales han demostrado ser un terreno difícil, donde el apoyo puede ser efímero y las críticas, constantes.