Los altos niveles de rating ponen a Christian Martinoli como uno de los narradores más queridos por parte de la afición mexicana, sobre todo en el fútbol. No obstante, su peculiar estilo lo ha llevado a vivir situaciones complicadas como el día en el que un hombre lo agredió en un supermercado mientras él iba acompañado de una de sus hijas.
En su visita al podcast ‘Papá Luchón’, conducido por Mauricio Ymay y Rafael Puente Jr., el analista de Tv Azteca generó indignación luego de relatar un pasaje oscuro que le ha dejado ser el mayor detractor del fútbol mexicano a nivel nacional.
Durante su participación, además del ámbito deportivo, sus compañeros de profesión le cuestionaron si la fuerte forma en la que habla de los clubes de la Liga MX y de la propia Selección Mexicana le han traído consecuencias fuera de las cabinas, a lo que el narrador respondió que sí.
¿Qué sucedió?
En respuesta a ello, Christian Martinoli destacó que en una de sus frecuentes visitas a tiendas de autoservicio vivió una situación complicada para su familia: “estaba en un supermercado, un sujeto me empezó a insultar con una de mis hijas”, relató.
Ante ello, Rafa Puente indagó sobre qué fue lo que había pasado ese día y Martinoli explicó que no pasó a mayores y solo se trató de insultos: “Pinche Martinoli, chinga tu madre”, le dijo el hombre. Del mismo modo, el extécnico de fútbol le preguntó si había respondido de alguna manera o si había habido algún intercambio de palabras, a lo que contestó: “Para de mamar, ya entendí tu desmadrito, párale” al mismo tiempo que le pidió a su hija alejarse unos pasos para evitar que escalara a una agresión física.
En el mismo comentario Christian explicó que al escuchar los gritos un empleado del lugar se acercó a él para ver que todo estuviera en orden y apoyarlo en cualquier cosa que necesitara, ante ello destacó: “Llegó un wey del supermercado a preguntarme si tenía un pedo y le dije no, nada más que este wey que se calme y ya”.
No es algo nuevo para el periodista
Si bien esta situación lo puso en alerta al estar acompañado de su hija, en palabras del mismo comunicador no es ni la primera ni será la última vez en la que reciba insultos por parte de los aficionados pues entiende que sus palabras pueden herir susceptibilidades ya que, en su mayoría, sus comentarios suelen ser resaltando los aspectos negativos de los equipos.
Incluso comentó que es cuestión de cada ocho días recibir ‘mentadas de madre’ en el estadio, aunque a diferencia de estas personas él lo toma como parte de su trabajo y no se engancha en conflictos que están fuera de su control.