El pasado sábado 10 de agosto, la Delegación Mexicana perdió una oportunidad crucial de obtener una medalla en los Juegos Olímpicos de París 2024. Carlos Sansores, taekwondoín originario de Chetumal, Quintana Roo, cayó en el combate por la medalla de bronce, extendiendo así una sequía de medallas en esta disciplina que ha persistido durante los últimos dos ciclos olímpicos.
A pesar de haber entregado siete preseas a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) en el pasado, el taekwondo mexicano no ha logrado obtener ninguna medalla olímpica reciente, incluso tras una inversión gubernamental significativa. Según información de ESPN, la CONADE, presidida por Ana Gabriela Guevara, destinó 174 millones 991 mil 778.15 pesos al ciclo olímpico de París 2024 para el taekwondo mexicano.
Lamentablemente, los resultados en París 2024 fueron similares a los de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. México solo logró clasificar a dos deportistas de los ocho posibles en taekwondo: Carlos Sansores y Briseida Acosta, ambos eliminados en la primera ronda. Según el mismo medio, la Federación Mexicana de Taekwondo A.C. recibió 167 millones 598 mil 023.15 pesos entre 2021 y 2023, una cifra que triplica el presupuesto de la Federación de Judo, sin que esta inversión se reflejara en el medallero olímpico.
Carlos Sansores y Daniela Souza, representantes mexicanos en taekwondo en París 2024, recibieron más de siete millones de pesos en becas y estímulos deportivos durante el ciclo olímpico, proporcionados por la CONADE y la Secretaría de la Defensa Nacional, donde ambos figuran como sargentos segundos. Sansores, quien compitió por el bronce, fue el que más recibió, con un total de cuatro millones 622 mil 880 pesos, sumando los ingresos de la CONADE y la SEDENA. Por su parte, Souza recibió dos millones 770 mil 875 pesos desde 2021 hasta el primer trimestre de 2024, siendo eliminada en la primera ronda en París.
La CONADE solía presumir del taekwondo como una de las disciplinas más exitosas de México en los Juegos Olímpicos, con medallas ganadas desde Sydney 2000. Sin embargo, tras el fracaso en Tokio 2020, donde también solo compitieron dos de los ocho deportistas posibles, la esperanza era mejorar en París 2024. Ahora, la falta de resultados plantea serios cuestionamientos sobre la efectividad de la inversión y la preparación de los atletas para las futuras competencias olímpicas.