Los Juegos Olímpicos de México 1968 no solo se recuerdan por las hazañas atléticas y los momentos históricos, sino también por las innovaciones revolucionarias que cambiaron para siempre la forma en que se organizan y se viven estos eventos globales. Desde avances tecnológicos hasta nuevos enfoques en la competición, México 68′ marcó un antes y un después en la historia olímpica, resaltando por supuesto, la incursión de la transmisión televisiva a color.
Hablar de los Olímpicos de México 68′, es sinónimo de innovación, pues uno de los puntos más significativos para aquella justa, fue la introducción de la televisión satelital a color. Por primera vez, millones de espectadores en todo el mundo pudieron ver los eventos olímpicos en vibrante color, gracias a la transmisión vía satélite.
Utilizando el satélite Intelsat III F-2, los eventos de los Juegos Olímpicos de México pudieron ser transmitidos en tiempo real a diversos países. Este satélite, lanzado poco antes de los juegos, permitió que las imágenes en color de los eventos llegaran a hogares en Norteamérica, Europa y Japón, entre otros lugares.
Es importante mencionar que, este magno evento fue pionero en transmitir la competencia a color; sin embargo, fue en Roma 60′ cuando se transmitieron por primera vez en televisión a todo el mundo, aunque completamente a blanco y negro.
La transmisión en color de la justa olímpica del 68′ tuvo un impacto profundo en la cultura y la sociedad. Las vibrantes imágenes de los atletas compitiendo en escenarios tan icónicos como el Estadio Olímpico Universitario y la Alberca Olímpica, dejaron una impresión duradera en el público. Sin duda alguna, uno de los momentos más recordados y laureados, fue el ver a María Enriqueta Basilio hacer historia al convertirse en la primera mujer en encender el pebetero olímpico.
Otro de los más emblemáticos, es el saludo de los ‘Panteras Negras’, donde los atletas estadounidenses Tommie Smith y John Carlos levantaron sus puños enguantados en negro durante la ceremonia de premiación de los 200 metros, en señal de protesta contra la discriminación racial. La poderosa imagen de sus guantes negros y sus medias sin zapatos en la televisión a color amplificó el mensaje de su protesta y lo hizo aún más resonante.