Don Beto, un ferviente aficionado de los Pumas de la UNAM, se ha convertido en una figura conocida en las redes sociales gracias a su creatividad para inventar porras para su equipo favorito. Recientemente, uno de sus cánticos para el conjunto auriazul ganó popularidad y fue bien recibido por un amplio sector de la afición felina.
Motivado por este éxito, Don Beto decidió llevar su talento al escenario internacional y creó una nueva porra para apoyar a la Selección Mexicana en la Copa América.
Con entusiasmo, compartió el video de su creación en sus redes sociales. “Venga México, México. Vamos México, México”, es el sencillo pero apasionado cántico que el influencer diseñó para alentar al combinado azteca.
Sin embargo, la respuesta a esta nueva porra no fue la que Don Beto esperaba. En lugar de recibir el apoyo de los internautas, se enfrentó a una ola de críticas y burlas. Los usuarios de redes sociales no tardaron en expresar su desaprobación con comentarios mordaces y ofensivos. “Ya wey, van a pensar que todos los mexicanos estamos así de pend*jos”, escribió un usuario, reflejando el tono general de las reacciones negativas.
Algunos comentarios fueron aún más duros y personales, cuestionando la salud mental de Don Beto y sugiriendo que buscara ayuda profesional. “Ya bájele a la loquera”, “Está bien pendj… no tendrá familia que lo pueda internar en un Asilo o centro Psiquiátrico”, y “Le hicieron falta varias vacunas”, fueron algunas de las respuestas más duras. Otros internautas no se quedaron atrás en sus críticas, recomendándole directamente que acudiera a un psicólogo. “Don, vaya al doctor de verdad”, “Ya tomó su medicina?”, y “Señor, ha pensado que a lo mejor necesita ayuda psicológica?” fueron algunos de los comentarios que reflejaron la severidad del rechazo.
El caso de Don Beto pone en evidencia la volatilidad de la fama en las redes sociales, donde el público puede cambiar rápidamente de admirador a crítico feroz. Aunque su primera porra para los Pumas fue un éxito rotundo, su intento de replicar esa fórmula con la Selección Mexicana no logró el mismo efecto y, en cambio, desató una ola de comentarios negativos que cuestionaron no solo su creatividad, sino también su juicio personal.
A pesar de las críticas, Don Beto sigue siendo un apasionado aficionado del fútbol y probablemente continuará expresando su apoyo de la manera que mejor sabe hacerlo: a través de sus originales porras. Queda por ver si se recuperará de este tropiezo y logrará nuevamente conectar con el público en el futuro.