A más de 10 años de la histórica final entre América y Cruz Azul en el Clausura 2013, misma en la que las Águilas se quedaron con el trofeo tras imponerse en la tanda de penaltis a la ‘Máquina’, uno de los jugadores azulcrema que cobraron uno de los lanzamientos, Osvaldo Martínez, se sinceró al aceptar el inmenso nerviosismo que tuvo al momento de ejecutar su tiro desde los once pasos.
La final del Clausura 2013 es considerada por muchos aficionados y analistas como uno de los episodios más emblemáticos del balompié nacional. La rivalidad entre el América y Cruz Azul siempre ha generado expectativas, pero fueron las circunstancias particulares de este enfrentamiento especialmente el dramatismo de la resolución por penaltis, son las que la han colocado en un lugar especial dentro de la historia del fútbol mexicano.
Aunque los penaltis pueden ser crueles para algunos, son precisamente estos momentos de tensión los que a menudo definen las carreras de los jugadores y dejan una huella imborrable en los aficionados. Partiendo de esa premisa, el exfutbolista de las Águilas, Osvaldo Martínez, contó en entrevista para el canal de El RePortero, que su cobro de aquella noche del 26 de mayo del 2013, fue el que más miedo y nerviosismo le generó en toda su carrera.
Fue uno de los penales que con más miedo pateé, porque mientras iba al punto penal para patearlo, miré el estadio y veo 50-60 mil personas y digo “No, acá fallo un penal y me comen vivo”. Entonces sabía que tenía que patear con mucha fe, con la esencia que me caracteriza, y gracias a Dios, Corona fue al lado derecho y yo pateé hacia el lado izquierdo de su perfil.
Cabe recordar que, ‘Osvaldito’ fue el encargado de cobrar el tercer lanzamiento de los azulcrema en aquella final, solo por detrás de Raúl Jiménez y Christian Benítez. De hecho, el paraguayo externó la confianza que le generó que sus dos compañeros previamente lograran marcar sus respectivos cobros.
Ese fue uno de los penales con que más miedo pateé realmente. Había mucha presión y más porque dos jugadores que cobraron antes que yo, se resbalaron en el punto penal a los alrededores, eso te originaba más inseguridad para patear. Pero yo desde el primer momento alce la mano para cobrar un penalti porque siempre me gustaron ese tipo de retos, los penales y siempre me gusta patear el primero.