Edith “N”, víctima de Fofo Márquez, reacciona a la sentencia de 17 años: “Tengo miedo por mi vida”

Hoy, 29 de enero del 2025, el juez decidió que Fofo Márquez pasará en prisión 17 años y 6 meses por el delito de feminicidio en grado de tentativa, esto tras agredir a Edith “N” en el estacionamiento de una plaza en Naucalpan el año pasado.

El ataque, ocurrido el 22 de febrero de 2024, fue captado en video, lo que permitió que el caso adquiriera notoriedad en redes sociales y medios de comunicación. Según detalló la misma fuente, las imágenes muestran a Márquez golpeando violentamente a la mujer, un acto que generó una ola de indignación pública y puso en evidencia las dinámicas de poder que el influencer solía proyectar en sus contenidos digitales.

La víctima de Fofo Márquez tuvo un encuentro con la prensa al salir de la audiencia y admitió que tiene miedo de la actitud de Sandra Xóchitl, la madre del influencer. Así lo dijo:

“Me vi intimidada en la audiencia por su mamá, en la manera en que me vio y tengo miedo por mi vida. Si le llega a pasar a mi familia algo o a mi esposo directamente a ellos los señalo como responsables. Todavía no puedo salir sola a ningún lado, tengo que salir siempre acompañada”.

Del mismo modo, aseguró que todavía no es capaz de ver a Fofo Márquez debido al proceso psicológico por el que está pasando.

Finalmente, la víctima aseguró que vive con miedo y que no ve arrepentimiento en el influencer: “Termina el proceso con terror, tengo mucho miedo. Sentí que no hay arrepentimiento, que no está ubicado en lo que está viviendo”.

Más allá de las implicaciones legales para Fofo Márquez, este caso ha generado una reflexión colectiva sobre el papel de los influencers y las responsabilidades que conlleva su posición de poder. La actitud de Márquez, caracterizada por el abuso y la ostentación, se convirtió en un símbolo de las desigualdades y los privilegios que persisten en la sociedad mexicana.

El ataque a Edith “N” y el posterior fallo judicial no solo representan justicia para la víctima, sino que también marcan un precedente en la lucha contra la violencia de género y el abuso de poder. Este caso, ampliamente discutido en redes sociales y medios de comunicación, seguirá siendo un punto de referencia en el debate sobre la responsabilidad social de las figuras públicas en México.