Una jornada marcada por la violencia ha dejado a tres operadores de transporte público muertos en el municipio de Cuautitlán Izcalli, en el estado de México, en dos hechos ocurridos por separado.
Las víctimas, quienes laboraban para la empresa Izgasa, fueron atacadas a balazos en eventos que han desatado temor entre la población y los usuarios del transporte público.
El primer incidente ocurrió en la avenida Paseo de Los Bosques, en el pueblo de Tepalcapa, donde dos operadores fueron atacados sin previo aviso mientras realizaban sus labores. A pesar de que los lesionados recibieron atención médica inmediata por los equipos de emergencia, se confirmó su fallecimiento al llegar al Hospital Vicente Villada de la región.
Encuentran a taxista en la comunidad del Sabino
Horas más tarde, se reportó el hallazgo del cuerpo de otro operador en un paraje de la colonia El Sabino. El cadáver presentaba múltiples heridas de bala en la cabeza, lo que apunta a una ejecución directa.
Hasta el momento, no se han pronunciado autoridades estatales sobre esta ola de violencia que parece dirigida específicamente contra los trabajadores del transporte público. La falta de información oficial ha alimentado rumores y generado psicosis entre los usuarios del servicio, quienes han optado por cambiar de rutas o evitar los vehículos de Izgasa.
Los homicidios han encendido las alarmas entre los transportistas, quienes exigen medidas de seguridad inmediatas para continuar con su trabajo sin poner en riesgo sus vidas.
Este ambiente de incertidumbre ha afectado tanto a los trabajadores como a los ciudadanos que dependen del transporte público. Hasta ahora, se desconoce el motivo detrás de los ataques y la identidad de los responsables, lo que aumenta la incertidumbre.
Habitantes del municipio han exigido a las autoridades estatales y municipales que garanticen la seguridad de los ciudadanos y trabajadores del transporte público. Hay que recordar que Cuautitlán Izcalli, cerró el 2024 en la tercera posición por ser uno de los más inseguros de la entidad, según datos de la encuesta INEGI.
Mientras tanto, la ola de violencia sigue sumando víctimas, y la tranquilidad del municipio parece haberse desvanecido. Ante estos hechos, las investigaciones quedaron a cargo de funcionarios de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), quienes hicieron el levantamiento de los cuerpos para empezar las primeras indagatorias y dar con los responsables.