Con el objetivo de ofrecer una alternativa de transporte más económica, BlaBlaCar se ha posicionado como una de las plataformas más populares para viajes compartidos en la Ciudad de México. Los usuarios pueden encontrar conductores que ofrezcan lugares en sus autos para trayectos largos a precios considerablemente más bajos que los de los taxis por aplicación. Sin embargo, este modelo de transporte compartido no está exento de controversias, como quedó claro recientemente con un video viralizado en redes sociales.
El video en cuestión fue publicado por la usuaria Aydee OV, quien detalló un altercado con un conductor de BlaBlaCar. Según su relato, el viaje fue inicialmente acordado entre ella y el conductor, quien ofreció un trayecto desde la Ciudad de México hasta el metro General Anaya. Sin embargo, la situación se complicó cuando, al pasar la caseta de paz, el conductor cambió el rumbo y comenzó a dirigirse hacia Observatorio, lejos del destino acordado.
“En la aplicación decía metro General Anaya y me dice que no te da tiempo, que así es esto, entonces págame mi dinero si me vas a dejar en donde tu quieres”, explica Aydee en su video. El conductor, lejos de tratar de resolver la situación, respondió de manera tajante: “Así es esto, no es Uber y no te voy a dar el dinero si ya estamos en CDMX”. Ante el reclamo de la usuaria, el conductor la amenazó diciendo: “Jajaja, pues te llevo hasta Toluca, hazle como quieras, llamale a la policía si quieres”.
Este altercado, que captó la atención de miles de personas en redes sociales, generó una gran cantidad de comentarios y opiniones divididas sobre la naturaleza de los viajes compartidos en BlaBlaCar. Muchos usuarios salen en defensa del conductor, argumentando que la plataforma funciona de manera diferente a los servicios como Uber, donde los destinos son fijos y los acuerdos se hacen bajo una tarifa establecida.
“Primero que nada hay que entender que no es UBER, es una aplicación donde entre todos se cooperan para pagar la gasolina y las casetas”, mencionó un. Otro, también defensor del conductor, destacó que la plataforma se basa en un sistema de cooperación, donde los detalles del viaje deben confirmarse entre el conductor y los pasajeros antes de salir. “Culpable de ella. No está pagando un servicio. En un sistema de cooperación, ella tuvo que haber confirmado antes los puntos de salida y llegada con el conductor”, expresó.
Por otro lado, algunos usuarios de redes sociales señalan la falta de regulación de la plataforma como un factor clave en la disputa. “Es insegura esa opción de movilidad”, comentó un internauta, mientras que otros cuestionaron las garantías ofrecidas por BlaBlaCar frente a situaciones como la vivida por Aydee. Un usuario más expresó su preocupación: “Nunca entenderé a quienes usan esa aplicación. Creo que es incluso muy peligroso”.
Usuaria explica que conductor de Bla Bla Car actuó como patán y déspota
En un segundo video, Aydee relató más detalles del incidente, explicando que después de la discusión, se bajó del auto antes de llegar a Toluca, pues temía que la situación empeorara. Aseguró que la actitud del conductor era grosera y despectiva. “Sí, sí, aja lo que digas vete a la verga, no soy tu puto Uber”, dijo el conductor según el relato de la mujer. Tras el incidente, Aydee informó lo sucedido a BlaBlaCar, pero mencionó que la aplicación no le permitió dejar una reseña sobre el conductor.
El caso se ha convertido en un tema de debate sobre la necesidad de regular las plataformas de viajes compartidos, como BlaBlaCar. Si bien el servicio ofrece una opción más económica y flexible de transporte, este tipo de incidentes pone en evidencia las posibles fallas en la comunicación entre los usuarios y la falta de medidas claras para garantizar la seguridad y el cumplimiento de los acuerdos.
La viralización del video de Aydee ha reavivado la conversación sobre el futuro de las plataformas de viajes compartidos en México y el mundo, destacando la importancia de establecer normas claras para evitar que este tipo de situaciones se repitan. Mientras tanto, BlaBlaCar se enfrenta a una creciente presión para regular sus servicios y garantizar una experiencia más segura para todos sus usuarios.