Este 3 de enero, Monterrey experimentará un clima fresco y húmedo durante el día. La temperatura máxima alcanzará los 21 °C, con una probabilidad de lluvia del 62%, lo que indica posibles precipitaciones ligeras o moderadas. El cielo estará mayormente nublado, con una nubosidad del 79%, mientras que las ráfagas de viento podrían llegar a los 26 kilómetros por hora, aportando una sensación de frescura adicional. Los niveles de rayos ultravioleta serán bajos, alcanzando un índice máximo de 1, lo que sugiere una exposición solar mínima.
Por la noche, las condiciones climáticas se mantendrán frescas, con una temperatura que descenderá hasta los 15 grados Celsius. Aunque la probabilidad de precipitación disminuirá al 25%, el cielo permanecerá mayormente cubierto, con una nubosidad del 96%. Las ráfagas de viento continuarán siendo moderadas, alcanzando los 24 kilómetros por hora, lo que podría hacer que la noche se sienta más fresca de lo esperado.
En general, este miércoles será un día nublado y con posibilidades de lluvia, ideal para planear actividades bajo techo o llevar un paraguas al salir. Es importante abrigarse bien por la noche, ya que la combinación de la baja temperatura y el viento puede intensificar la sensación de frío.
La sequía de Monterrey
La mejor temporada para ir a la capital regia es de enero a agosto y de octubre a diciembre, época en la que se presenta un clima cálido o caluroso, donde apenas hay lluvias y con temperaturas que van de los 27 a 35 grados.
Debido a que en el verano las temperaturas son extremadamente altas, la capital vive una sequía que llega a su apogeo entre julio o agosto, una temporada que también es conocida como “canícula”.
En contraste, la temporada de lluvia comienza en el otoño, siendo septiembre el mes con más precipitaciones, no obstante, ha habido ocasiones en las que han ocurrido tormentas que dejan severas inundaciones entre abril y junio. En enero, el mes más frío, el termómetro disminuye a una media de 14 grados aunque el “día más frío” usualmente se registra en febrero.
Según las marcas, la temperatura más baja en la historia de Monterrey fue la de 1983, cuando el termómetro marcó -7.5 grados, mientras que la última nevada cayó en diciembre de 2004; en contraste, el día con la temperatura más alta se registró el 24 de abril de 1958, cuando se alcanzaron los 48 grados.
Qué tipo de clima hay en México
México es un país beneficiado, pues su ubicación geográfica (su salida al mar Caribe, al océano Pacífico y la división que le hace el Trópico de Cáncer) lo convierte en una zona megadiversa, siendo hogar de al menos el 12% de las especies del mundo, siendo 12 mil de ellas endémicas.
Aunque el Trópico de Cáncer fracciona al país en dos zonas climáticas –una templada y otra tropical– lo cierto es que la altitud, latitud y la distribución de tierra y agua hacen que en el territorio nacional se identifiquen hasta siete tipos de clima: cálido subhúmedo, seco, semiseco, seco desértico, cálido húmedo, templado subhúmedo, templado húmedo y frío.
En este panorama, no es extraño que en las partes altas de Chihuahua el termómetro alcance los -30 grados de temperatura, mientras que en el desierto de Mexicali, igual al norte del país, ascienda hasta registrar 50 grados centígrados.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, la temperatura promedio anual del país es de 19 grados, sin embargo, hay ciudades como Mexicali, Culiacán, Ciudad Juárez, Hermosillo, Torreón, Saltillo y Monterrey en donde las temperaturas son en extremo altas.
Como prueba de ello está San Luis Río Colorado, una ciudad ubicada en Sonora y que se encuentra en los límites del Gran Desierto de Altar de Baja California y el estado de Arizona y que es bien conocida por poseer el récord de la temperatura más alta registrada en el país, luego de que el 6 de julio de 1966 el termómetro subió hasta marcar los 58.5 grados centígrados.
En contraste, la temperatura más baja registrada en la historia fue la del 27 de diciembre de 1997, cuando el termómetro descendió hasta marcar -25 grados en el municipio chihuahuense de Madero.
Sin embargo, esta variedad de climas se han visto afectados en los últimos años por el cambio climático y expertos prevén un futuro desalentador para el país con una reducción considerable de aguas pluviales anuales y un aumento considerable de las temperaturas.
Los estragos ya han comenzado a reflejarse con afectaciones a los agricultores y ganaderos debido a las sequías o las severas inundaciones, mientras que en las épocas de calor se ha visto un incremento en el número de contingencias ambientales en las principales urbes, como es el caso de la Ciudad de México.