La temporada de lluvias y ciclones tropicales de 2024 ayudó a México a romper una racha de cuatro años de sequía severa en tres cuartas partes del territorio nacional, y aunque el nivel de las presas de almacenamiento no regresó a los promedios históricos, el nivel de precipitaciones permite iniciar el 2025 con una mejor perspectiva respecto al año anterior.
En el caso del Sistema Cutzamala, la crisis que enfrentó en el primer semestre de 2024 llevó su nivel hasta un 25% durante el mes de mayo, no obstante, los datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) indican que iniciará el 2025 con un almacenamiento superior al 60 % de su capacidad total.
Con un volumen promedio de 8 metros cúbicos por segundo, el Cutzamala se encarga de abastecer aproximadamente el 20% del agua que se consume en la Ciudad de México, por lo cual resulta de gran relevancia que durante la temporada de estiaje presente buenos niveles.
De manera adicional, el gobierno de la Ciudad de México destinará en 2025 más de 15 mil millones de pesos en programas de recuperación hídrica y mantenimiento de pozos profundos dentro del Valle de México.
Los registros de Conagua apuntan que las tres principales presas del Cutzamala se encuentran al 63%, lo que le da un margen de seis meses, aproximadamente, en espera de la siguiente temporada de lluvias.
Presas de México muestran recuperación
En cuanto al almacenamiento hídrico, las 210 presas principales del país contenían, hasta el 15 de diciembre, un volumen aproximado de 76 mil 693 millones de metros cúbicos. Esto corresponde al 61 % de su capacidad máxima.
En cuanto al Sistema Cutzamala: El Bosque con un 74.7 % de llenado, Valle de Bravo con un 67 %, y Villa Victoria con un 51.1 %, sumando en total 510.34 millones de metros cúbicos, lo que equivale al 65.2 % de su capacidad.
Respecto a las precipitaciones, entre el 1 de enero y el 15 de diciembre, Conagua, a través del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), informó que el acumulado fue 2.1 % inferior al promedio registrado en el país durante estas mismas fechas en años anteriores.
Este comportamiento está directamente ligado al análisis de los niveles de sequía: al 30 de noviembre, el 53.8 % del territorio nacional estaba libre de esta condición, mientras que un 30.6 % presentó algún grado de sequía, que varía entre moderada y excepcional, y el 15.7 % restante atravesaba condiciones anormalmente secas.
Entre el 9 y el 15 de diciembre, se registraron récords de temperaturas extremas en varias regiones de México, según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). En Pungarabato, Guerrero, la máxima alcanzó los 40.2 grados Celsius, mientras que en Culiacán, Sinaloa, y Comala, Colima, las temperaturas llegaron a los 40 grados.
En cuanto a mínimas, el 11 de diciembre, en Bocoyna, Chihuahua, la temperatura descendió a -15.9 grados, superando el registro de -13.5 grados que se había alcanzado apenas dos días antes.