Disputas entre grupos de civiles armados y el uso de la fuerza para alcanzar objetivos políticos resaltaron entre las principales razones por las cuales se registró un incremento en la violencia en varios estados del país durante 2024, según un reciente informe de la organización Armed Conflict Location and Event Data Project (ACLED).
Al hacer un análisis de la incidencia delictiva en México entre enero y noviembre de este año, especialistas que integran el proyecto identificaron que la violencia tuvo un alarmante crecimiento en al menos tres entidades: Sinaloa, Chiapas y Tabasco.
De acuerdo con el reporte elaborado por la analista Sandra Pellegrini, Tabasco fue la demarcación que registró un mayor incremento en este rubro, pues en 2024 se contabilizaron 318 eventos de violencia, en comparación con los 107 reportados en 2023, lo que representa un alza del 197%.
En esta entidad se tiene registrado que la violencia política se extendió a 86 localidades durante este año, frente a las 37 comunidades contabilizadas por ACLED en 2023.
El 5 de enero de 2024, el gobierno estatal confirmó la renuncia de Hernán Bermúdez Requena como secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Su dimisión ocurrió en medio de una oleada de violencia en distintos puntos de Villahermosa, a lo cual se sumaron los señalamientos en su contra por presuntos nexos con La Barredora, un grupo criminal que surgió como célula del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y ahora se disputa el control de la entidad con esta organización.
Respecto a Sinaloa, ACLED registró un total de 531 eventos de violencia entre enero y noviembre de 2024, cifra notoriamente superior a los 254 reconocidos en 2023.
“La escalada de violencia en Sinaloa se debió principalmente al aumento de los ataques contra civiles, los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los grupos armados, así como las disputas entre estos últimos”, puede leerse en el reporte.
Cabe señalar que las hostilidades en diversas zonas del estado, especialmente en Culiacán, tuvieron un repunte desde el 9 de septiembre de 2024 debido a la pugna que mantienen Los Chapitos y La Mayiza, escisiones del Cártel de Sinaloa. Durante los primeros tres meses de esta confrontación, las autoridades estimaron un saldo de más de 600 muertos.
En cuanto al estado de Chiapas, el análisis de ACLED expone que los eventos de violencia incrementaron de 161 en 2023 a 267 entre enero y noviembre de 2024, lo que equivale a un crecimiento del 66%.
La información compartida por el proyecto de investigación señala que los enfrentamientos entre grupos armados no estatales se intensificaron y se volvieron más letales durante 2024, pues dejaron al menos 130 personas muertas, una cifra seis veces mayor a la registrada en 2023.
La entidad sureña vive, al menos desde el año 2021, bajo el asedio de grupos como el Cártel de Sinaloa y el CJNG que buscan hacerse con el control de actividades que van desde el tráfico de migrantes y la venta de drogas hasta la extorsión y la explotación minera.