Autoridades federales dieron a conocer este 28 de diciembre que una célula de Los Chapitos usan los centros de rehabilitación para ocultar a varios de sus integrantes. Esta información surge en el contexto de la guerra que los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán mantienen con la facción de Los Mayos desde el pasado 9 de septiembre.
Este sábado se dio a conocer la detención de Juan Manuel Bernal Hernández, alias Drácula, jefe de una célula de Los Chapitos en el municipio de Escuinapa, Sinaloa.
Durante el operativo, donde se arrestaron a otras cuatro personas, se aseguraron diversas armas de fuego, narcóticos y un vehículo.
El operativo se llevó a cabo tras la identificación de un inmueble en el municipio antes mencionado donde se encontraban personas armadas, por lo que las autoridades solicitaron una orden de cateo a un juez, misma que les fue otorgada.
Al cumplimentar el cateo, los agentes federales y militares fueron atacados con disparos de arma de fuego, lo que derivó en un enfrentamiento. En el intercambio, uno de los elementos de seguridad resultó herido y fue trasladado a un hospital para recibir atención médica.
Fuentes federales confirmaron a Infobae México que Bernal Hernández se encontraba subordinado a Juan Francisco Villegas Vélez, alias ‘El Güero Pink‘, jefe de plaza de Los Chapitos en Escuinapa.
El Drácula, según las autoridades, se encargaba de las actividades de narcomenudeo, la compra-venta de armamento, municiones y equipo táctico, así como del control de precios y distribución de pesca de camarón en dicho municipio.
Se tiene conocimiento que Juan Manuel Bernal administraba y dirigía centros de rehabilitación de adicciones, en los que ocultaba a integrantes de células de sicarios en Sinaloa.
Junto con Bernal Hernández fueron detenidas otras cuatro personas más en flagrancia delictiva; se aseguraron cinco armas largas y un arma corta, un vehículo, un inmueble y narcóticos.
Cabe recordar que la Fiscalía General del estado de Sinaloa informó el pasado 11 de diciembre que 31 internos fueron reclutados “voluntariamente” por sujetos armados de cinco centros de rehabilitación.
La fiscal de Sinaloa, Zulema Sánchez Kondo, indicó que las personas fueron llevadas por su propia voluntad a cinco centros de rehabilitación en Mazatlán, 16 fueron reclutados de uno, 4 en otro, 10 más en otro centro y uno en otro.
Nueve días después, otro centro de rehabilitación fue atacado por sujetos armados, quienes dispararon en el lugar y luego le prendieron fuego, dejando un saldo de 18 personas heridas.
Autoridades de salud detallaron que las víctimas presentan quemaduras que abarcan entre el 10% y el 20% de sus cuerpos. Uno de los heridos permanece intubado debido a la gravedad de sus lesiones, mientras que otros dos están en estado crítico.