Bertha Elisa Noeggerath Cárdenas, mejor conocida en el medio artístico nacional como Dulce, murió el 25 de diciembre de 2024 a los 69 años de edad tras sufrir complicaciones derivadas del cáncer de pulmón que padecía. La noticia fue confirmada por sus seres queridos a través de redes sociales, quienes pidieron comprensión y respeto al público en este complicado momento.
Por esa razón, la información sobre la última voluntad de la cantante tamaulipeca ha caído a cuenta gotas. De acuerdo con diversos programas de espectáculos, los restos de la estrella fueron trasladados a una casa funeraria ubicada al sur de la Ciudad de México en Navidad y cremados la mañana del 26 de diciembre bajo instrucciones de su única hija, Romina Mircoli.
No se ofrecieron servicios funerarios, pero se especula que el 27 de diciembre se celebrará una misa privada por el eterno descanso de Dulce en una iglesia de CDMX. Hasta el momento, la familia no ha confirmado esta información, solo algunos amigos cercanos de la cantante han hablado al respecto, incluso, mencionaron la Basílica de Guadalupe como un posible escenario.
Hija de Dulce no recoge las cenizas de su madre
Durante una transmisión en vivo del programa ‘Ventaneando’ se comentó que Romina Mircoli podría no presentarse en la casa funeraria donde fueron cremados los restos de su madre y sería su esposo quien recogería la urna.
Además, se informó que no se ofrecieron servicios funerarios, solo se resguardaron los restos de la cantante hasta el proceso de cremación.
“Romina está muy afectada”
Un amigo cercano a la familia de Dulce identificado como Roberto Hernández, concedió una entrevista para Addis Tuñón, para aclara algunos puntos sobre el fallecimiento de la cantante. Ahí, reveló que Romina Mircoli se encuentra devastada tras el deceso de su madre.
“Romi realmente está muy afectada. Ella, creo que de una forma u otra, no es la primera vez que Romina es atacada, cuando eres hijo de una figura pública de la magnitud de Dulce, pues estás sumergido en una vorágine que te arrastra, de tal manera que todo lo que haga tu mamá a ti te llega, es el precio de ser el hijo de un artista y creo que Romina ha pagado ese precio la vida entera.”
“Creo que es válido, justo y entendible (...) no tiene ningún deseo ni ninguna necesidad de estar hablando con la prensa porque la van a lastimar, le van a decir cosas que le van a doler mucho.”