Una explosión devastadora, atribuida al almacenamiento de pirotecnia, sacudió la tarde del 24 de diciembre una vivienda en la colonia Valle del Sol, en el municipio de Guadalupe, en Nuevo León, dejando un saldo trágico de una persona fallecida y siete lesionadas, entre ellas un bebé. Según informó Protección Civil del estado, el incidente ocurrió alrededor de las 18:40 horas y tuvo lugar en un inmueble que funcionaba como bodega.
De acuerdo con los reportes oficiales, el inmueble afectado, ubicado en la calle Del Paisaje, sufrió daños catastróficos. Ante el hecho, Ismael Duarte, representante de los Bomberos de Guadalupe, detalló que tanto la planta baja como la planta alta de la vivienda quedaron completamente destruidas, calificando el daño como “pérdida total”. En el interior de la bodega fue hallado el cuerpo sin vida de una persona, cuya identidad no ha sido revelada hasta el momento.
Entre los heridos se encuentran una mujer adulta, un bebé de pocos meses y dos hombres adultos. Tres de los lesionados recibieron atención médica en el lugar del siniestro, mientras que uno de ellos, con quemaduras de tercer grado, fue trasladado al Hospital de Zona para recibir tratamiento especializado. Las autoridades no han proporcionado más detalles sobre el estado de salud de los afectados.
Por su parte, medios locales reportaron que, a pesar de la magnitud de la explosión, las viviendas colindantes no sufrieron daños significativos. Sin embargo, como medida de precaución, los residentes de las casas aledañas fueron desalojados temporalmente mientras los equipos de emergencia trabajaban en el lugar. Duarte confirmó que el incendio provocado por la explosión ya fue controlado, aunque las labores de remoción y aseguramiento del área continuaban al cierre del reporte.
Según las autoridades, el uso de la vivienda como bodega para almacenar pirotecnia parece ser el factor detonante de esta tragedia, según las primeras investigaciones. Este tipo de incidentes pone de relieve los riesgos asociados al manejo inadecuado de materiales explosivos, especialmente en contextos residenciales. Por ello, las autoridades locales no han emitido aún un comunicado oficial sobre posibles sanciones o investigaciones adicionales relacionadas con el almacenamiento de pirotecnia en el lugar.
El incidente ocurrió en una fecha particularmente sensible, la víspera de Navidad, cuando muchas familias se preparaban para las celebraciones. Este hecho subraya la importancia de extremar precauciones en el manejo de productos pirotécnicos, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas como Guadalupe.
La tragedia ha generado conmoción en la comunidad local, que ahora enfrenta las secuelas de un evento que se puede lamentar en una víctima mortal. Las autoridades de Protección Civil de Nuevo León y los equipos de emergencia continúan trabajando en la zona para garantizar la seguridad de los residentes y evaluar los daños materiales.