Los Chapitos usaron la seguridad de la hija de El Mencho como moneda de negociación en la alianza con el CJNG

En medio de una feroz guerra interna del Cártel de Sinaloa, Los Chapitos, liderados por Iván Archivaldo Guzmán Salazar, y el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), comandado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, lograron una alianza que hasta hace poco parecía imposible.

Este pacto tiene como objetivo enfrentar a Ismael Zambada Sicairos, alias “El Mayito Flaco”, heredero de la facción de los Zambada, y enemigo común de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán y el grupo criminal de las cuatro letras.

De acuerdo con la información de Illicit Investigations, el primer paso en la negociación ocurrió antes de la traición a “El Mayo Zambada”, cuando Audias Flores Silva, alias “El Jardinero”, un hombre de confianza de “El Mencho”, recibió un mensaje directo de Iván Archivaldo Guzmán a través de un emisario, Abdiel Guzmán Araujo, primo de Iván y representante clave de Los Chapitos.

En el mensaje se proponía la alianza entre ambas agrupaciones, propuesta que intrigó a “El Mencho” y que llevó a decirle a su colaborador que organizara una reunión para ver los detalles.

En la primera reunión, llevada a cabo en Guadalajara, Jalisco, “El Jardinero” expresó dudas sobre la fiabilidad de Los Chapitos, debido a las tensiones previas entre ambos cárteles. No obstante, Abdiel explicó que la alianza era estratégica para ambos bandos, ya que permitiría enfrentar a los Zambada y redistribuir las plazas más rentables del narcotráfico en México y en Estados Unidos.

Una vez superada la primera etapa de contacto, el CJNG organizó una segunda, en donde estableció las condiciones para avanzar en el pacto.

Una de las más significativas fue que uno de los integrantes de Los Chapitos, en este caso Jesús Alfredo Guzmán Salazar, alias “Alfredillo”, sería trasladado temporalmente a un rancho de “El Mencho” en Jalisco como garantía de seriedad en la alianza.

Esta demanda era muy arriesgada para “Los Menores”, considerando el episodio del 15 de agosto de 2016, cuando los hermanos Guzmán Salazar fueron secuestrados en el exclusivo restaurante La Leche, en Puerto Vallarta, Jalisco, por parte de miembros del CJNG.

Según diversas versiones recogidas en investigaciones periodísticas y testimonios, tras el secuestro “El Chapo” Guzmán, desde prisión, habría lanzado una amenaza directa contra “El Mencho”, exigiendo la liberación inmediata de sus hijos. Se dice que El Chapo dejó claro que, de no devolverlos, habría represalias contra su hijo “El Menchito”.

Por otro lado, se señala que Ismael “El Mayo” Zambada, entonces el principal líder en libertad del Cártel de Sinaloa, jugó un papel clave en las negociaciones y en la recuperación de Los Chapitos. Finalmente, los hermanos fueron puestos en libertad.

Por ello la propuesta de trasladar al vástago de “El Chapo” a una casa de seguridad de quien antes fuera uno de sus mayores enemigos hizo alzar más de una ceja. Sin embargo, los sinaloenses pusieron sobre la mesa una advertencia contundente: si algo le sucedía a “Alfredillo”, responderían con represalias contra Jessica Johana Oseguera González, alias La Negra, hija de “El Mencho”.

“Alfredo se trasladaría a uno de los ranchos de El Mencho como garantía, pero advirtió que, si algo les sucedía, ellos también tenían como carta de seguridad la ubicación de Jessica Johanna Oseguera González, hija de El Mencho, en Estados Unidos”, según el medio antes citado.

Jessica Johana Oseguera González, conocida como “La Negra”, es hija del líder del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), una de las organizaciones criminales más poderosas de México.

Ha sido señalada por las autoridades estadounidenses como una pieza clave en las operaciones financieras del cártel, específicamente en actividades de lavado de dinero a través de diversas empresas vinculadas a su familia.

Entre las compañías que Jessica manejaba, destacaban Onze Black Tequila, Mizu Sushi Lounge y J&P Advertising, todas sancionadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, que las identificó como herramientas del CJNG para lavar dinero.

En febrero de 2020, Jessica fue arrestada en Washington D.C. cuando intentaba asistir a una audiencia de su hermano, Rubén Oseguera González, alias “El Menchito”, quien enfrentaba cargos de narcotráfico.

Durante su proceso judicial, Jessica aceptó su culpabilidad por operar negocios vinculados al narcotráfico y fue condenada en junio de 2021 a 30 meses de prisión. Cumplió parte de su condena en una cárcel de mínima seguridad en California y fue liberada en marzo de 2022.

Nacida en Estados Unidos pero criada en México, también es conocida por su formación académica. Según su madre, Rosalinda González Valencia, Jessica estudió mercadotecnia en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), en Guadalajara, y combinó su vida familiar con su actividad empresarial, aunque finalmente se le vinculó con las operaciones ilegales del CJNG.

Actualmente, Jessica enfrenta nuevas investigaciones en México por presuntas operaciones con recursos de procedencia ilícita, y su nombre volvió a la palestra pública debido a las negociaciones entre Los Chapitos y el CJNG, en las que su seguridad fue utilizada como una pieza de presión estratégica.