El gremio musical despidió la noche de este sábado a la leyenda del rock Javier Bátiz, quien construyó un fuerte legado en la industria a lo largo de 60 años de trayectoria.
Este aclamado guitarrista, conocido como “El Brujo” tijuanense, perdió la vida a los 80 años a causa de cáncer de próstata y complicaciones por una neumonía, aunque su legado se quedará para siempre en los corazones de sus admiradores quienes son testigos del talento que tuvo.
La muerte de Bátiz ha generado un luto nacional en la comunidad musical en el país en donde el maestro celebró sus seis décadas de trayectoria en un concierto masivo en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México.
Así fue el concierto de Javier Bátiz en el Zócalo de la CDMX
Fue justo en el corazón de la capital mexicana en donde Bátiz sintió el cariño de miles de personas que atestiguaron un magno concierto que se llevó a cabo en abril del 2017, en donde fue acompañado por la Orquesta Filarmónica Metropolitana.
En este homenaje sinfónico hubo una fuerte carga emotiva cuando el guitarrista apareció sobre el escenario, ataviado con su característico chaleco dorado y su melena al viento. “Gracias, muchas gracias por estar aquí conmigo”, dijo con una sonrisa, iniciando una velada que se convertiría en un emotivo tributo a su talento y a su vida.
En los últimos meses de este 2024 Bátiz había estado luchando contra una dura batalla contra el cáncer de próstata por lo que su presencia en la Plaza de la Constitución pareció, sin querer, más un regalo de despedida para sus seguidores.
Este concierto se convirtió en un ritual musical en donde se dieron cita niños, jóvenes y adultos mayores quienes compartieron el mismo espacio para cantar temas como “Caminata con Jesús” y otras joyas de su repertorio.
Javier Bátiz tuvo diferentes invitados en su show en el Zócalo capitalino
El clima de nostalgia y celebración se intensificó con la interpretación de “La flor de Sans Souci” junto a Rosalía León, seguida por una magistral participación de Eugenia León en “Pacífico jardín”.
La voz de León, suave y reconfortante, atrapó a la audiencia en una burbuja de calma antes de que Bátiz invitara a su pareja Claudia Madrid al escenario para tocar “I believe in my soul”, un emotivo recuerdo de Ray Charles.
El homenaje alcanzó su punto álgido con la participación del Dr. Shenka de Panteón Rococó, quien presentó “Tierra de nadie” como un manifiesto de unidad y resistencia. “Ya no queremos que ésta sea una tierra de nadie”, dijo Shenka, resaltando el poder del rock como medio de expresión social. Luego, Rosalía León y Bátiz ofrecieron una enérgica versión de “La chancla”, creando una celebración final que resonó en todo el Zócalo.
La jornada culminó con una despedida cargada de emoción. Bátiz, agradecido y lleno de amor por su público, cerró con una poderosa interpretación de “La casa del sol naciente” de Eric Burdon & The Animals, invitando a sus seguidores a abrazarse y compartir los últimos momentos en el proscenio. Antes de bajar del escenario, recibió un reconocimiento por parte de autoridades locales, de acuerdo con lo informado por la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.