Dulce, la reconocida cantante mexicana, enfrenta una situación médica delicada tras ser hospitalizada nuevamente en la Ciudad de México. Según declaraciones de su yerno, la artista padece una neumonía complicada que ha derivado en un problema neurológico, lo cual requiere una intervención quirúrgica urgente. Esta noticia ha generado preocupación entre sus seguidores y ha dado lugar a diversos rumores sobre su estado de salud.
En abril pasado, Dulce ya había sido hospitalizada debido a una recaída y se le extirpó un tumor, lo que incrementó la inquietud sobre su bienestar. Sin embargo, la familia ha desmentido categóricamente las especulaciones que sugieren que la cantante podría estar sufriendo de cáncer o que tenga un pulmón colapsado.
El diagnóstico actual, confirmado por los médicos, indica que Dulce presenta un empiema pleural.
¿Qué es un empiema pleural y cuáles son los síntomas?
El empiema pleural es una acumulación de pus en el espacio pleural, la cavidad que se encuentra entre las capas delgadas del tejido que recubren los pulmones y la pared torácica. Esta condición suele ser una complicación de una neumonía bacteriana, aunque también puede originarse a partir de infecciones intratorácicas o tras procedimientos quirúrgicos torácicos.
Los síntomas del empiema pleural pueden variar, pero generalmente incluyen:
- Fiebre: Los pacientes suelen presentar fiebre alta, que es signo de infección en el cuerpo.
- Dolor torácico: A menudo se experimenta dolor en el pecho, particularmente al respirar profundamente, toser o estornudar.
- Tos: Es común la presencia de una tos persistente, que puede o no estar acompañada de esputo.
- Disnea: La dificultad para respirar es frecuente debido a la acumulación de líquido en el espacio pleural que limita la expansión pulmonar.
- Fatiga y debilidad: Los pacientes con empiema pleural suelen experimentar una sensación general de debilidad y gran cansancio.
- Pérdida de apetito y pérdida de peso: La reducción del apetito es habitual, lo que puede llevar a una pérdida considerable de peso en un período corto.
- Sudores nocturnos: Es común que los pacientes experimenten sudoración profusa durante la noche.
El diagnóstico del empiema pleural se confirma generalmente mediante estudios de imagen como radiografías de tórax o tomografías computarizadas, y puede requerir una punción pleural para analizar el líquido. El tratamiento incluye el uso de antibióticos para combatir la infección y procedimientos para drenar el pus acumulado, como la toracocentesis o la colocación de un tubo de drenaje. En casos más severos, puede requerirse cirugía para eliminar el tejido infectado o necrosado. El diagnóstico y tratamiento temprano son esenciales para evitar complicaciones graves.