La periodista Anabel Hernández ha asegurado que no ha sido demandada por la actriz y cantante Ninel Conde, quien figura en su libro Emma y las otras señoras del narco. La obra, publicada en 2021 por Penguin Random House, detalla presuntos vínculos de figuras públicas del espectáculo con el crimen organizado, entre ellas la también conocida como “Bombón asesino”, quien inició una demanda por daño moral contra la editorial, acusándola de afectar su imagen profesional y reputación.
“El caso de la señora Conde, debo decir que yo fui a la Ciudad de México convocada por la editorial Penguin Random House. Yo no estoy demandada, lo puedo afirmar categóricamente: a mí, Anabel Hernández, la señora Conde no me ha denunciado”, dijo la investigadora en entrevista con Publimetro.
Detalló que hay una querella contra la editorial y ella fue llamada al juzgado en calidad de testigo, al igual que al señor Juan Zepeda, el exesposo de la cantante.
¿Qué pasó en la audiencia?
En la audiencia de desahogo de pruebas, llevada a cabo hace unas semanas, Anabel Hernández y Juan Zepeda comparecieron como testigos, mientras que Ninel Conde, según la periodista, no asistió.
“Ella quería interrogarme, pero no se presentó. Su ausencia quedó registrada en el acta del juez. Yo lo que fui a hacer es repetir con puntos y comas lo que publiqué en mi libro; ni más ni menos”, señaló Hernández en la entrevista.
En el contexto de la demanda por daño moral presentada por Ninel Conde contra la editorial Penguin Random House, Gustavo Herrera, abogado de la actriz y cantante, ofreció declaraciones clave al medio antes citado.
Abordó tanto el desarrollo de la audiencia como los aspectos legales del caso, destacando puntos que considera perjudiciales para la defensa de la periodista Anabel Hernández.
Herrera confirmó que Anabel Hernández fue la única testigo que declaró durante la audiencia, ya que Carmen Aristegui, quien también fue llamada, no se presentó; mientras que Juan Zepeda, exesposo de Ninel Conde, abandonó el juzgado argumentando que estaba recibiendo amenazas telefónicas. Según el abogado, la ausencia de Zepeda debilitó el caso de la editorial y la periodista, ya que él había sido señalado como una fuente clave en las afirmaciones publicadas en el libro.
“El testimonio de Hernández fue contraproducente para ella. Admitió que la información sobre Ninel Conde le fue proporcionada por Juan Zepeda, lo cual sería un testimonio de oídas, ya que no le consta personalmente. Esto afecta la credibilidad de su declaración y, en consecuencia, de las afirmaciones hechas en el libro”, declaró Herrera.
La declaración de Anabel Hernández
En su testimonio, Hernández afirmó que parte de la información sobre los presuntos vínculos de Ninel Conde con Arturo Beltrán Leyva provino de Juan Zepeda, exesposo de la cantante. Según la periodista, Zepeda jugó un papel clave en los primeros contactos de Conde con el narcotráfico. “Él es quien recibe un cargo de Arturo Beltrán, una de las partes esenciales del libro”, explicó.
Sin embargo, el abogado de Conde cuestionó la validez de estas declaraciones. “Lo grave de su testimonio es que admite que todo se lo contó Juan Zepeda. Si esa información no le consta personalmente a Zepeda, sería un testimonio de oídas, lo que carece de validez legal en un caso como este”, sostuvo Herrera.
Según el libro, Ninel Conde habría tenido una relación cercana con Arturo Beltrán Leyva, líder del cártel de los Beltrán Leyva. Hernández cita testimonios anónimos que indican que Conde aceptó reunirse con el capo a cambio de 100 mil pesos.
Asimismo, la autora menciona que la artista podría haber adquirido propiedades mediante triangulaciones de recursos presuntamente relacionados con actividades delictivas. Estas acusaciones han sido rechazadas por Conde, quien ha negado cualquier vínculo con actividades ilícitas.
El abogado de la artista informó que la resolución de este caso se espera antes del 13 de diciembre, fecha en que los juzgados entrarán en receso. En caso de que el fallo no sea favorable para Conde, el abogado planea apelar y buscar embargar las regalías del libro. “La editorial ha lucrado con el nombre y la imagen de mi clienta, y es momento de que dejen de manchar su reputación”, declaró.
El libro, que se publicó en 2021, ha generado controversia por involucrar a otras figuras del espectáculo, como Galilea Montijo y Alicia Machado, en supuestos vínculos con el crimen organizado.
Aunque las acusaciones han sido rechazadas por los implicados, el caso ha puesto en el centro del debate la responsabilidad periodística y los límites entre la libertad de expresión y la protección de la reputación de las figuras públicas.
El desenlace del caso será crucial no solo para las partes involucradas, sino también para sentar precedentes en torno a la publicación de investigaciones que tocan temas sensibles en México.