El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, hizo una metáfora para explicar cómo se están preparando para enfrentar las amenazas del próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la deportación masiva de personas migrantes, según la propuesta de su campaña para combatir la crisis en la frontera sur.
El gobernador dijo ante los medios de comunicación que su gobierno está bajo aviso de tormenta; sin embargo, que será conforme a que se acerca el día en que llegue al poder Trump será cuando podrán saber con precisión qué implicaciones podría tener la “deportación masiva” de personas migrantes .
“Nos estamos preparando, no sabemos ni si quiera lo que va a pasar, estamos en un aviso de tormenta, no sabemos, quizá conforme se vayan acercando los días, vamos a saber si es huracán, si no es y de qué grado, pero estamos preparándonos”, dijo Villarreal desde Xalapa, Veracruz, tras el evento de toma de protesta de Rocío Nahle.
En la actualidad, la frontera tamaulipeca, una de las más dinámica del país, recibe cerca de 500 migrantes en tránsito y cuentan con siete albergues que alojan entre 2 mil 500 y 3 mil personas que están a la espera de una cita para aclarar su situación migratoria y puedan cruzar hacía los Estados Unidos.
Aseguró que Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo son áreas clave en el proceso para que los migrantes continúen su camino. Además, que sigue de cerca los encuentros entre las autoridades mexicanas y estadounidenses, incluidos los intercambios recientes entre la presidenta Claudia Sheinbaum y Donald Trump.
La semana pasada el próximo presidente de los Estados Unidos amenazó con poner aranceles de 25% a los productos mexicanos y canadienses que fueran importados a aquella nación, ello hasta que los gobierno vecinos ofrezcan resultados respecto a la crisis migratoria y la exportación de fentanilo.
Ante las declaraciones de Donald Trump, la mandataria federal Claudia Sheinbaum precisó que las caravanas de migrantes que llegan desde el sur del país con dirección a los Estados Unidos han reducido, incluso algunas de ellas no llegan hasta la frontera derivado a que aceptan el apoyo que ofrece el gobierno mexicano y desisten de seguir su camino.