La noche del sábado 30 de noviembre se registró un ataque armado que cimbró nuevamente al país y evidenció la violencia que persiste en el estado de Guanajuato, un territorio en disputa del crimen organizado.
Ocho personas fueron asesinadas en la vía pública, justo en la entrada del municipio de Apaseo el Grande. Entre las víctimas mortales hay elementos del Cuerpo de Bomberos y al menos un paramédico, además de que dos civiles —un hombre y una mujer— resultaron lesionados.
A través de su área de comunicación social, el Ayuntamiento de Apaseo el Grande especificó que fue alrededor de las 21:30 horas cuando autoridades del C4 emitieron el reporte correspondiente a la agresión.
Los hechos ocurrieron en las inmediaciones del acceso al municipio, en una zona conocida como “La Ye” o “Trébol de los Apaseos”, en la cual se ubican varios negocios de comida y venta de cajeta.
“En los comercios señalados, y a decir por testigos, arribó al lugar un vehículo de lujo color blanco, del cual descendieron varios masculinos que sin mediar palabra dispararon sus armas de fuego”, puede leerse en el comunicado de las autoridades municipales.
Acorde con los primeros reportes, en varias de las tiendas y puestos de venta de cajeta había personas consumiendo bebidas alcohólicas. Fueron precisamente las y los clientes de dichos establecimientos quienes fueron víctimas de la masacre.
En el lugar perdieron la vida ocho hombres, de los cuales seis ya fueron identificados como
- Ricardo Eduardo López Ortega, paramédico de traslado adscrito al sector Cortázar del Sistema de Urgencias del Estado de Guanajuato (SUEG).
- Ulises Ramírez Vázquez, bombero de Apaseo el Grande e hijo de otro elemento del cuerpo de emergencias.
- Alejandro Ortega, también integrante del Cuerpo de Bomberos municipal.
- Fernando Antonio “N”.
- Ángel Adrián “N”.
- Édgar “N”.
Los nombres de los otros dos fallecidos, así como de las personas que resultaron lesionadas, no han sido difundidos hasta el mediodía de esta fecha.
“Personal de Policía Municipal de forma inmediata arribó al lugar, ubicando a los lesionados, desplegando de inmediato un operativo en conjunto con las fuerzas del estado y autoridades federales”, agregó el Ayuntamiento en su comunicado.
Según reportes preliminares compartidos por el periódico AM, las autoridades ministeriales encontraron alrededor de 50 indicios balísticos en el lugar, mismos que fueron recolectados para integrar la investigación correspondiente.
Hasta el momento de la presente publicación, las autoridades no han informado sobre ninguna captura relacionada con esta masacre, por lo que se desconocen las identidades de los presuntos responsables, así como el móvil del ataque.