El pasado miércoles 27 de noviembre, una pelea entre dos conductores de microbús en la alcaldía Iztapalapa desató indignación en redes sociales. El enfrentamiento, ocurrido en las avenidas Rojo Gómez y Ermita, fue grabado por testigos y evidenció las tensiones generadas por la competencia desmedida en el transporte público de la Ciudad de México.
De acuerdo con testigos, la pelea inició por la disputa de pasajeros, un problema recurrente en la zona debido a la saturación del sistema de transporte público. En los videos que circularon ampliamente en plataformas digitales, se observa cómo uno de los choferes aborda la unidad de su rival y lo golpea de forma agresiva, sin importarle la presencia de pasajeros, entre ellos mujeres y niños.
El momento más tenso ocurre cuando una mujer, aparentemente usuaria del transporte, interviene para intentar detener el enfrentamiento. A pesar de su esfuerzo, el agresor continúa golpeando a su contrincante antes de que la situación se calme.
El incidente generó una ola de reacciones en redes sociales, donde miles de usuarios expresaron su indignación. Los comentarios oscilaron entre críticas al comportamiento de los conductores y reflexiones sobre los riesgos que enfrentan los usuarios del transporte público.
“Esto refleja la falta de regulación en el transporte público de la ciudad. Es inaceptable que los pasajeros estén expuestos a este tipo de situaciones”, comentó un usuario en la red social X (anteriormente Twitter).
Otros aprovecharon para ironizar sobre la escena: “La lucha por el pasaje se está convirtiendo en el nuevo deporte extremo de Iztapalapa”, publicó otro internauta.
Los videos acumularon miles de vistas y compartidos, lo que visibilizó nuevamente los problemas de fondo en el transporte público capitalino, como la falta de supervisión y la competencia por captar usuarios.
A pesar de la violencia del altercado, hasta el momento no se han reportado heridos graves. Asimismo, no se tiene registro de detenciones relacionadas con el incidente. Sin embargo, las imágenes han generado llamados a las autoridades para que refuercen la supervisión en las rutas de transporte público y eviten que estas disputas pongan en riesgo a los pasajeros.