Valdemar Tariácuri Hernández, empresario de Michoacán secuestrado el pasado 18 de noviembre en un restaurante de su propiedad ubicado en Pátzcuaro, rompió el silencio y relató lo que vivió durante los tres días que estuvo privado de la libertad.
Este jueves, en entrevista con la periodista Azucena Uresti para Radio Fórmula, el propietario del restaurante Gran Tariácuri reveló que desconoce cuál fue el motivo de su secuestro a 10 días de los hechos.
“La verdad desconozco hasta el día de hoy los motivos, nunca fui extorsionado anteriormente, nunca me habían molestado. Nunca supe los motivos reales, hasta el día de hoy para mí son una incógnita”, declaró.
Tras asegurar que se encuentra tranquilo en compañía de sus hijos, hermanas y madre, reveló que sus agresores lo mantuvieron todo el tiempo vendado con cita adhesiva. Lo único que pudo asegurar que una persona siempre se encontraba cerca de él, cuidándolo.
En esa línea, refirió que pese a las condiciones, sus captores le brindaron alimentos y agua.
A la pregunta directa sobre si recibió algún tipo de agresión física, Tariácuri rechazó emitir algún comentario al respecto.
“La verdad es que yo estoy agradecido de que tengo vida, estoy agradecido incluso con estas personas. Yo sé que Dios estuvo conmigo en esos momentos tan difíciles y que Dios tocó el corazón de estas personas para que yo pudiera regresar a mi casa y con mi familia”, comentó a Uresti.
Así fue la liberación del empresario
Tariácuri reveló que durante la madrugada del 21 de noviembre, uno de sus captores se acercó a él y le explicó que lo dejarían en libertad. Aseguró que en ningún momento le solicitaron algún tipo de rescate. Su familia tampoco fue contactada.
“Al final hubo una persona que me dijo: te vas a ir, te vamos a perdonar y sigue con tu vida. Me dejaron en una tenencia, dentro de un edificio. Me pusieron una sudadera y me dijeron que ahí me quedara”, relató.
Después de un largo rato y tras atreverse a retirar la cinta de sus ojos, el empresario se percató que se encontraba al interior de un baño.
“Empecé a caminar despacito porque estaba lastimado de un pie, pero se me hizo difícil porque no reconocí el lugar”, agregó.
Luego de tocar distintos timbres y no obtener respuesta, Tariácuri consiguió pedirle a los propietarios de una casa que llamaran al 911. Finalmente, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán atendieron el reporte y lo resguardaron.
“Me han ofrecido apoyo de seguridad, pero yo creo no necesitarlo”, comentó.
Claves sobre el caso
De acuerdo con datos de la SSP y la Fiscalía General del Estado (FGE), el secuestro del empresario ocurrió alrededor de las 17:30 horas del 18 de noviembre.
A través de redes sociales se dio a conocer un video de una cámara de seguridad que muestra el momento en el que un grupo de sujetos armados ingresan al restaurante Gran Tariácuri, donde se encontraban decenas de comensales. Algunos de los clientes fueron amagados durante los hechos.
Tras inspeccionar minuciosamente el establecimiento, los agresores hallan al empresario y se retiran del recinto junto a él.
Tres días más tarde, se confirmó que había sido localizado con vida.
“Resultado del intenso operativo efectuado por la Guardia Civil en coordinación con el Ejército Mexicano, la Fiscalía y policías locales en la región Lacustre, hace unos momentos en el municipio de Erongarícuaro fue localizado con vida el empresario Tariácuari Hernández”, reportó la SSP.
Acorde con fuente de seguridad citadas por periodistas e imágenes obtenidas de las videocámaras del establecimiento, el grupo criminal detrás de este hecho sería una célula perteneciente al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).