Así es como el Cártel del Golfo genera ganancias millonarias con la pesca de tiburón y huachinango

Desde el año 2007, autoridades fronterizas de Estados Unidos advertían las operaciones de tráfico de drogas que el Cártel del Golfo había logrado establecer en la región marítima que conecta a Texas con Tamaulipas. Ahora, más de 17 años después, el Departamento del Tesoro exhibió el funcionamiento de una red de pesca ilegal que genera cuantiosas ganancias para esta organización criminal.

A través de una serie de sanciones, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) reveló detalles sobre las actividades que este cártel coordina desde la Playa Bagdad, también conocida como Playa Costa Azul, perteneciente al municipio de Matamoros.

Según los hallazgos compartidos en un comunicado, el Cártel del Golfo basa el desarrollo de estas actividades en lanchas. Líderes de la organización delictiva costean el envío de pescadores a aguas estadounidenses para extraer ejemplares de huachinango (pargo rojo) y tiburón.

Debido a que la pesca de tales especies está sometida a estrictas regulaciones en EEUU, son más abundantes en dicho territorio. Aprovechándose de la situación, socios del cártel cruzan la frontera y extraen una gran cantidad de ejemplares, acorde con el Departamento del Tesoro.

Los peces obtenidos durante las jornadas de pesca son enviados a la Playa Bagdad —ubicada poco más de 13 kilómetros al sur de la línea divisoria entre Texas y Tamaulipas—.

Desde este punto, la mercancía puede tener dos destinos, según los negocios y acuerdos establecidos por los jefes del cártel. Por un lado, las especies extraídas de forma irregular pueden ser vendidas a los mercados pesqueros mexicanos; por otro, pueden ser etiquetadas de forma fraudulenta para su exportación a Estados Unidos.

Al frente de este entramado criminal, la OFAC identificó a cinco individuos:

• Francisco Javier Sierra Angulo, alias ‘El Borrado’, jefe del Cártel del Golfo en Matamoros y anterior encargado de la plaza de Valle Hermoso.
• Los hermanos Ismael Guerra Salinas (alias ‘Mayelo’) y Omar Guerra Salinas (alias ‘Samorano’), supervisores del tráfico de drogas y personas desde Playa Bagdad hacia EEUU por medio de lanchas.
• Raúl Decuir García (alias ‘La Burra’) e Ildefonso Carrillo Sapien (alias ‘El Chivo’) son identificados como dueños de campamentos de lanchas que proveen de embarcaciones a los pescadores para cruzar a EEUU y extraer especies en beneficio del Cártel del Golfo.

“La pesca ilegal, no regulada y no declarada, así como las prácticas pesqueras nocivas derivadas de ella, se encuentran entre las mayores amenazas para la salud de los océanos y son causas relevantes de la sobrepesca a nivel mundial, lo que contribuye al colapso de pesquerías que son fundamentales para el crecimiento económico, los sistemas alimentarios y los ecosistemas de numerosos países a lo largo del mundo”, sostiene el Departamento del Tesoro en su reporte oficial.

Las lanchas usadas por el Cártel del Golfo para estas operaciones suelen tener entre seis y nueve metros de longitud, acorde con la OFAC. Y aunque no se especifican las dimensiones de los cargamentos de pescado, se presume que estas actividades le generan al grupo criminal ganancias por millones de dólares al año.

Datos compartidos por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) establecen que en 2016 México exportó mil 471 toneladas de huachinango. Por las ventas externas de esta especie en dicho año se obtuvieron nueve millones 55 mil dólares en ganancias (equivalentes a más de 187 millones de pesos al valor de cambio actual).