Las aguas frescas son bebidas tradicionales mexicanas elaboradas a partir de agua, azúcar y frutas, semillas o flores. Estas refrescantes bebidas son populares por su sabor natural y su capacidad para mitigar el calor. Entre las más comunes se encuentran la de horchata, hecha de arroz y canela; la de jamaica, preparada con flores de hibisco; y la de tamarindo, hecha con la pulpa de esta fruta.
También destacan las aguas de limón, sandía y melón, entre otras. Suelen servirse frías y son una opción habitual en mercados y eventos festivos en México, siendo apreciadas por su frescura y sabor.
Taste Atlas, la enciclopedia gastronómica que reúne la opinión de expertos culinarios de todo el mundo, tiene muy bien valoradas a las aguas frescas, pero hay un sabor que resalta por encima de los demás. Se trata del agua de horchata, misma que alcanza la increíble calificación de 4.5 estrellas de 5.
Además, Taste Atlas describe al agua de horchata así: “En su forma básica, la horchata es una bebida a base de arroz que se elabora remojando arroz en agua, generalmente junto con canela. La combinación se mezcla, generalmente se endulza y se cuela para alcanzar una textura suave y cremosa. La horchata tiene una larga historia y probablemente raíces europeas y africanas”.
Y añade: “Muchos creen que se basó en antiguas bebidas europeas o romanas que se elaboraban con cebada. Probablemente también estuvo influenciado por la horchata valenciana del mismo nombre, hecha con chufa, que potencialmente tiene su origen en Nigeria, donde se llama kunnu aya. La horchata mexicana se vende a través de vendedores ambulantes y se encuentra comúnmente en restaurantes mexicanos dentro y fuera del país. También están disponibles versiones embotelladas o en polvo. La horchata se sirve mejor bien fría”.
Otros sabores de aguas frescas mexicanas
El agua de horchata, una bebida tradicional en México, ofrece varios beneficios debido a sus ingredientes naturales. Principalmente elaborada con arroz, canela y a veces almendras o coco, proporciona una serie de nutrientes que pueden contribuir a la salud general.
Esta bebida es una buena fuente de carbohidratos, principalmente provenientes del arroz, que aportan energía. Al ser rica en carbohidratos, puede ser útil para recuperar energías tras el ejercicio físico o durante un día caluroso.
La canela, otro ingrediente clave, posee propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, lo que puede favorecer la digestión y ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre. Además, la canela es conocida por su capacidad para mejorar la circulación sanguínea.
Cuando se incorpora almendra en su preparación, el agua de horchata también se enriquece con proteínas vegetales, grasas saludables y vitamina E, que es beneficiosa para la piel y el sistema inmunológico.
El agua de horchata es naturalmente libre de lactosa, lo que la convierte en una opción adecuada para quienes tienen intolerancia a esta sustancia. Su sabor dulce y especiado la hace una opción agradable y refrescante, favoreciendo la hidratación, especialmente en climas cálidos.