Después de anunciar su separación a mediados de julio tras casi siete años juntos, Gabriel Soto e Irina Baeva se han vuelto centro de atención tras protagonizar varios momentos juntos.
Sus apariciones públicas en los mismos lugares ocasionaron que los medios y algunos de sus seguidores pusieran sobre la mesa la posibilidad de una reconciliación, misma que desmintieron, pero aseguraron que seguirían frecuentándose hasta resolver algunos temas pendientes.
Anteriormente, la actriz de origen ruso compartió que se había enterado de la decisión de su separación de la misma manera que el resto de las personas, lo que desató una ola de especulaciones, las cuales aumentaron a raíz de que el actor negó haber llegado al altar con Baeva.
Un tiempo después de su ruptura amorosa, y en medio de la controversia por sus constantes apariciones juntos, Gabriel Soto fue cuestionado por la prensa sobre el mismo tema, pero la situación se tornó diferente cuando mencionó la palabra “exesposa”
Gabriel Soto confirma que sí se casó con Irina Baeva
Pese a las fotos y videos que se difundieron sobre la ceremonia matrimonial que presuntamente se llevó a cabo en Acapulco, el actor mexicano negó completamente la situación días después de anunciar su separación, pero de pronto todo cambió en un encuentro con los medios, donde admitió que la actriz había sido su esposa.
“Sí hubo una ceremonia, y obviamente después hicimos unas fotos, pero sí hubo ceremonia”, compartió para la prensa en su llegada al aeropuerto de Houston.
Al escuchar las declaraciones, uno de los reporteros le preguntó si consideraba a Irina como su esposa, a lo que respondió: “Por supuesto, claro, exesposa ya. Fue una ceremonia, y obviamente muy íntima, muy familiar, pero bueno, finalmente así se dieron las cosas. Evidentemente fue algo muy importante”.
Por otra parte, compartió que el reciente viaje que compartieron como expareja, fue una oportunidad para hablar y sanar varias cosas, pues sus declaraciones suelen malinterpretarse.
“En la vida pública la verdad es que las cosas se tergiversaron mucho. Se dijeron muchas cosas que no fueron ciertas, y no habíamos tenido la oportunidad de convivir en ese sentido. Sí habíamos tenido un par de cenas, pero no un viaje como tal, como el de ahora, y con el tiempo para platicar, para sanar, para explicarnos muchas de las cosas que a lo mejor sucedieron”, detalló.
Finalmente, confesó sentirse bien con la idea de que su relación amorosa puede terminar en una linda amistad, aunque reconoce estar arrepentido de que su situación sentimental se haya convertido en todo un tema público: “Me arrepiento de todo lo que pasó, públicamente sí”, concluyó.