¿Sabías que una adecuada higiene en el baño elimina hasta un 30% el contagio de enfermedades producidas por bacterias y gérmenes, como la gastroenteritis o la gripe?
Un baño limpio, agradable a la vista, con buen aroma, con inodoro, lavamanos y paredes claramente limpias, sin manchas en el suelo o en cualquiera de sus componentes, es señal de limpieza constante.
Sin embargo, pareciera que para realizar dicha labor se requiere hacer uso de todo tipo de químicos para cumplir con esa misión, sin pensar en las consecuencias que estos pueden generar a largo plazo.
Factores a considerar
Por supuesto que la limpieza del inodoro no es una tarea por la que todos peleen para realizar, ya que no tiene nada de atractivo meter la mano en donde caen todos los desechos fétidos y malolientes de nuestro organismo, a pesar de ello es necesario mantenerlo limpio para prevenir el desarrollo de gérmenes o bacterias que pongan en riesgo nuestra salud.
- Lavar el baño es una tarea que requiere de atención al detalle para evitar daños y garantizar una limpieza efectiva, para lo cual se requieren elementos muy básicos para lograrlo:
- Rociar con un limpiador especializado los inodoros, dejándolo actuar durante unos minutos, después con una microfibra humedecida es suficiente para limpiar la tapa, el asiento y el tanque.
- Con otro paño secar bien las superficies para evitar que se acumule humedad y se deteriore el material del WC y evitar que los microorganismos se reproduzcan.
- Para el interior, utilizar un cepillo para frotar bien el conducto del inodoro, eliminando cualquier residuo de suciedad o bacterias. Finalmente, tirar de la cadena para enjuagar todo.
- NO es necesario realizar limpieza profunda todos los días, basta con limpiar ligeramente para evitar la acumulación de polvo y suciedad y mantenerlo siempre en buen estado.
El limpiador ideal
A pesar de toda la gama de productos existentes en los pasillos de los supermercados, la realidad es que no todo lo que ahí se ofrece es adecuado para limpiar el sanitario, ya que algunas sustancias son demasiado corrosivas, abrasivas o agresivas para la “porcelana” y sus componentes.
Elegir el limpiador ideal no solo ayudará a mantener el baño libre de bacterias, sino que también prolongará la vida útil de los componentes, evitando problemas de fugas y desgaste prematuro.
- Limpiadores a base de vinagre. Es un excelente desinfectante natural que no solo elimina bacterias, sino que también ayuda a remover el sarro y las manchas sin ser agresivo con las válvulas y demás componentes internos del inodoro.
- Bicarbonato de sodio. Junto con el vinagre o solo, el bicarbonato es un limpiador suave pero eficiente que ayuda a neutralizar malos olores y eliminar manchas sin desgastar las partes internas del WC.
- Limpiadores de baño con ácido cítrico. Este tipo de limpiador es menos agresivo que los productos con cloro, pero igual de efectivo para eliminar manchas y desinfectar.
- Limpiadores comerciales sin cloro. Existen limpiadores de baño diseñados específicamente para el WC que no contienen cloro ni químicos abrasivos, seguros para las tuberías y piezas internas, sin perder eficacia contra gérmenes y suciedad, en el etiquetado debe decir: “aptos para inodoros”.
- Jabón líquido neutro. Es una excelente opción. Limpia las superficies externas del inodoro sin causar desgaste y ayuda a mantener un ambiente limpio sin usar productos agresivos.