Un testigo muerto y ‘malas prácticas’: así fue la audiencia de Germán “N”, acusado por el asesinato de Alejandro Arcos

El alcalde de Chilpancingo fue ejecutado a menos de una semana de haber asumido el cargo

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Germán "N" recibió el nombramiento
Germán "N" recibió el nombramiento como jefe policiaco el 1 de octubre. (Fiscalía General del Estado de Guerrero)

Después de una audiencia inicial que se prolongó por más de 12 horas, la jueza Yolanda Mora Silva dictó prisión preventiva contra Germán “N”, encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública de Chilpancingo, quien es señalado como presunto implicado en el asesinato del alcalde Alejandro Arcos Catalán.

En el Juzgado de Control y Enjuiciamiento Penal de la Ciudad Judicial, el agente del Ministerio Público presentó diversos elementos para imputar a German “N” por su supuesta participación como autor intelectual del crimen. Aunado a ello, la Fiscalía General del Estado (FGE) acusó al detenido de ser integrante de Los Ardillos, organización criminal que estaría detrás del homicidio.

La principal base de la Fiscalía para estos señalamientos es, de acuerdo con periodistas que tuvieron acceso a la audiencia, una entrevista con un comerciante de nombre Domitilo Cándido Pila, quien actualmente está muerto.

Presuntamente, el testigo habría sido privado de su libertad por miembros de la Policía Comunitaria de Petaquillas el pasado 27 de octubre y trasladado a un rancho en Quechultenango, bastión de Los Ardillos.

En una entrevista con la Fiscalía, Cándido Pila habría revelado que durante su secuestro escuchó una conversación en la que tres presuntos miembros del grupo criminal señalaron a Germán “N” como supuesto autor intelectual del asesinato de Alejandro Arcos. El comerciante fue hallado en avanzado estado de descomposición al interior de su domicilio el pasado 6 de noviembre, según reveló El Sur de Acapulco.

Germán "N" es capitán de
Germán "N" es capitán de justicia militar retirado. (Fiscalía General del Estado de Guerrero)

Por su parte, Germán “N” aseguró que una persona cercana al alcalde lo contactó el 31 de septiembre para aconsejarle que le enviara su currículum, con el objetivo de que lo contemplaran para ser director de Seguridad Pública. Cuatro días antes había sido asesinado Ulises Hernández Martínez, quien se perfilaba como el próximo jefe policiaco de Chilpancingo.

“Me entrevistó Alejandro Arcos Catalán el 31 [de septiembre] y el 1 [de octubre] él me dio el nombramiento”, dijo Germán “N” en un breve encuentro con medios de comunicación.

Según su versión, el 6 de octubre recibió la noticia del asesinato de Arcos Catalán mientras estaba en un restaurante al sur de Chilpancingo. “Me avisaron después de las cinco de la tarde que habían encontrado un cuerpo decapitado”, señaló durante un receso de la audiencia.

El agente del Ministerio Público presentó ante la jueza los documentos de la necropsia que se le practicó al presidente municipal. Los exámenes arrojaron que la causa de muerte fue una hemorragia masiva causada por decapitación. Es decir, la extremidad fue cercenada cuando aún estaba vivo.

Durante la extensa jornada, la jueza Mora Silva señaló que la Fiscalía estatal habría incurrido en malas prácticas por dos motivos: 1) presentó la acusación contra Germán “N” por ser un supuesto miembro de Los Ardillos ante un juzgado del fuero común, cuando debió hacerlo ante un juzgado federal por tratarse de delincuencia organizada; y 2) divulgó los nombres y datos de los testigos entrevistados para obtener sus pruebas, lo que podría representar un riesgo para ellos.

Germán “N” permanecerá en prisión preventiva durante el plazo de 144 horas (seis días) que impuso la juzgadora para evaluar las pruebas y determinar si es o no vinculado a proceso por el ilícito.

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