Datos de la Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados del INEGI de 2022 recabados por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), alrededor de 58.3 millones mexicanos, es decir, aproximadamente la mitad de la población, son menores de edad, adultos mayores, personas con capacidades diferentes o padecen algunas enfermedades, por lo que son susceptibles de recibir cuidados en el hogar y la mayoría de estas actividades son realizadas por las mujeres, hecho que limita sus oportunidades de desarrollo personal y profesional.
Al encontrar que dedican tres cuartas partes de su tiempo a estas tareas, creció la preocupación por distribuir estas responsabilidades de forma equitativa entre todos los miembros de la sociedad, pues esto afecta a la población femenina desde hace muchos años incluso cuando está redactado en la Constitución Política de la Ciudad de México que debe reconocerse el derecho al cuidado en los artículos 9º, 10º y 11º que estas labores deben distribuirse de manera equitativa.
Esto dio pie a que diferentes entidades como la FES Aragón se involucraran en el desarrollo de iniciativas como la de la Ley del Sistema Integral de Cuidados para la Ciudad de México, propuesta por la Cámara de Diputados que busca garantizar el acceso equitativo a las labores de cuidado y mejorar las condiciones laborales de quienes las realizan.
Propuestas que buscan equidad en las labores
De acuerdo con una publicación de UNAM Global, Toyka Bashkoz Hernández, académica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, “tan sólo en 2022, el valor económico de las labores domésticas y de cuidados realizados por mayores de 13 años fue de 7.2 billones de pesos, lo cual representa el 24.3 del PIB de México”.
También señaló que estas actividades son realizadas en su mayoría por mujeres, por lo que, “además de reconocerse, deben distribuirse de tal manera que más integrantes de la sociedad se involucren en ellas, y aquí las parejas juegan un papel relevante”.
La también ex asesora de Igualdad Sustantiva en la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo de la CDMX, explicó que en Francia dedican un día a la semana para la familia e incluso es conocido como el Día de la Convivencia, donde los niños no asisten a la escuela y las madres no trabajan, lo que refleja la importancia de este modelo, pues busca fomentar la comunidad y aliviar las cargas de cuidado que recaen principalmente sobre las mujeres.
Hernández menciona que llaman ‘escalera sin peldaños’ a un modelo en el que se muestra “la imposibilidad de ascenso de las mujeres en el espacio laboral por las altas cargas de cuidados que deben realizar”. Con esto subrayó la importancia de promover nuevas masculinidades en las que los hombres asuman un papel más activo y corresponsable en el cuidado familiar y resaltó que esta perspectiva busca abordar las desigualdades de género que persisten en el sistema actual.
A su vez, en el contexto de las guarderías de tiempo completo, la académica sugirió evaluar cuántas horas trabaja una madre y si su salario es suficiente para cubrir necesidades básicas como alimentación y transporte. Con este enfoque integral es posible identificar las desigualdades que deben ser atendidas por el sistema manteniendo siempre una perspectiva de género.
Una forma de proponer la corresponsabilidad de cuidados
UNAM Global señala que en México hay 24 millones de estudiantes de nivel básico cuyos padres deben encontrar alternativas de cuidado durante los días de consejo técnico y para muchos el taller “Más diversión con matemáticas” ha sido una opción ideal.
Rosell González, académico del Instituto de Matemáticas, implementó esta propuesta desde mayo de 2024 debido a que considera que los cuidados son un asunto que debe resolverse en comunidad, por lo que ofrece un espacio en el que los hijos e hijas de padres que pertenecen a la UNAM disfruten de actividades lúdicas al tiempo que aprenden algo de matemáticas cuando no hay clases.
Yohali Norma Hernández López, madre de dos niños en edad escolar, destaca que no sólo es un recurso valioso durante los viernes de consejo, sino que también ha ampliado los conocimientos de sus hijos más allá del currículo escolar, pues beneficia a los niños y genera conciencia sobre la importancia de la corresponsabilidad en los cuidados dentro de la comunidad universitaria.
Con esta actividad el profesor Rosell González menciona que además de promover la igualdad sustantiva en la corresponsabilidad de cuidados, desmitifica la idea de que las matemáticas son difíciles o aburridas, por lo que buscan que también “los infantes se lleven el gusto por las matemáticas porque esta ciencia no es difícil ni aburrida, y a través de actividades lúdicas lo estamos logrando”, destaca el profesor.