El pasado jueves 7 de noviembre, Rosa Isela Sánchez Soya rindió protesta como nueva titular de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) del Estado de Puebla para el periodo de 2024 a 2029; la abogada fue elegida por 35 votos a favor durante una sesión en el congreso local y ese mismo día asumió en el cargo.
Sánchez Soya es originaria de Puebla, tiene 52 años y es licenciada en Derecho por la Universidad del Valle de México (UVM), campus Puebla, así como una primera licenciatura en Administración en Ciencias Turísticas por la extinta Escuela Comercial Inglesa; medios locales refieren que lleva 12 años ejerciendo como abogada y que cuenta además con una maestría en Litigación de Juicios Orales.
Su experiencia litigando inició hace unos años en la Firma Salamanca y Asociados, fundada por su padre, el abogado Juan Manuel Sánchez Salamanca. Ha llevado casos en materia mercantil y familiar, pero a la par ofrece asesorías jurídicas en temas como divorcio y pensión alimenticia, las cuales son gratuitas para personas de grupos vulnerables, de acuerdo con publicaciones en su Facebook.
¿Por qué critican su designación como ombudsperson de Puebla?
Sin embargo, su designación ha generado controversia, pues consideran que había aspirantes con mayor experiencia, como el abogado Marco Antonio Moreno Rosado, fundador de la Asociación Jurídica Juvenil de Puebla A.C. y coordinador de Incidencia Política en la Red Democracia y Sexualidad Puebla. De hecho, el activista quedó en segundo lugar de la votación y Rosa Isela Sánchez lo nombró secretario Técnico Ejecutivo de la CDH.
El resto de los aspirantes a presidir la Comisión de Derechos Humanos poblana eran Luisa Núñez, madre buscadora y fundadora del Colectivo Voz de los Desaparecidos Puebla; el abogado y activista Luis Soriano Peregrina, quien fuera el primer encargado de la Comisión de Búsqueda de Puebla; y Elena Guerrero Flores, quien ha colaborado en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y en el área de Derechos Humanos de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla.
“Fue de las pocas aspirantes que no es cercana al funcionamiento de la CDH ya sea como usuaria o exfuncionaria. Tan solo en su comparecencia ante las y los diputados que la eligieron hoy como ‘la defensora del pueblo’, su exposición careció de perspectiva de género. A diferencia del resto de contendientes, su diagnóstico se basó en definiciones establecidas y datos oficiales; su plan se basó en la propia estructura que ya mantiene la CDH. Sus respuestas demostraron experiencia desde la filantropía y el asistencialismo, pero NO desde la defensa de los derechos humanos”, criticó en redes la periodista Carolina Fernández.
Sin embargo, más allá de la experiencia en materia de derechos humanos, la abogada fue criticada durante el proceso por su presunta cercanía con el gobernador electo Alejandro Armenta Mier y, en general con el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). De hecho, los diputados locales del PAN -quienes se abstuvieron de votar el pasado jueves- acusaron que su nombramiento era un ‘dedazo’ del morenista.
Y es que vale mencionar que Rosa Isela Sánchez es mamá de Alexa Espidio Sánchez, diputada suplente de Morena por el Distrito 16 en el Congreso del Estado de Puebla, además la joven abogada forma parte del equipo de transición del gobernador electo. Durante la campaña, Rosa Isela Sánchez acompañó a su hija a varios eventos tanto propios como en los del entonces candidato de Morena, Alejandro Armenta, lo que ahora está desatando críticas por su presunta cercanía con el oficialismo.
Ante estos señalamientos, la abogada se pronunció el día de su toma de protesta: “Yo creo que hay que dejar ese tema por la paz (el presunto vínculo con Armenta Mier y Morena) para que puedan evaluar mi trabajo y me conozcan realmente como soy. (Mi relación con él) es como la de cualquier otro ciudadano, realmente sabemos que es el gobernador electo, conozco cosas a través de mi hija pero yo me dedico a lo mismo, a hacer mi función, mi proyecto, estoy preocupada por ayudar”, dijo a los medios.