La reciente muerte de Ernestina Sodi, hermana de Thalía y Laura Zapata, despertó un interés especial por la vida de su familia, especialmente la relación entre sus hijas y las de la actriz Nailea Norvind. Aunque no todas son hijas de la misma madre, Camila y Marina Sodi, hijas de Ernestina, comparten un vínculo familiar único con Tessa Ia y Naian, las hijas de Nailea, lo que las une como hermanastras.
En los años 80, Ernestina Sodi contrajo matrimonio con el abogado Fernando González Parra, con quien tuvo a sus hijas, Camila y Marina. Sin embargo, la relación entre Sodi y González Parra terminó cuando él comenzó una relación con Nailea Norvind, de acuerdo con el periodista Gustavo Adolfo Infante. En los años 90, González Parra y Nailea tuvieron dos hijas: Tessa Ia y Naian, quienes crecieron sabiendo de su parentesco con las hijas de Ernestina.
Camila y Marina, por lo tanto, comparten el mismo padre que Tessa Ia y Naian, un lazo que las ha mantenido unidas a pesar de sus diferentes estilos de vida y trayectorias en el medio artístico.
Los caminos artísticos de las hermanas
Tessa Ia y Naian González Norvind heredaron el talento artístico de su madre. Tessa Ia, conocida por su interpretación en la película Después de Lucía y su participación en Rebelde, ha preferido mantener una vida discreta, enfocándose en la lectura, en viajes introspectivos y su faceta como cantante.
Por su parte, Naian, la hija mayor de Norvind, se ha destacado en la actuación y la fotografía. Entre Ciudad de México y Nueva York, ha cultivado su amor por el arte y ha colaborado en proyectos que reflejan su sensibilidad, incluyendo un retrato memorable que tomó de su media hermana Camila Sodi, una imagen que generó miles de reacciones en redes.
Camila Sodi y el peso de la fama
En contraste con Tessa y Naian, Camila Sodi ha estado bajo los reflectores desde joven, llevando sobre sí la fama de la dinastía Sodi y el apellido de su tía Thalía. A diferencia de sus hermanastras, Camila ha protagonizado varios titulares por su vida sentimental y su carrera artística. En 2008 se casó con el actor Diego Luna, con quien tuvo dos hijos antes de divorciarse en 2013. Actualmente, Camila mantiene su carrera en la actuación y la música, alternando entre la vida pública y la familiar.
Pese a sus diferencias, las cuatro hermanastras comparten un lazo genuino y una relación llena de cariño, unidas por el legado de su padre y el amor por el arte. Este vínculo se fortalece con el tiempo, mostrando que la familia no solo se define por el parentesco biológico, sino también por el respeto y el apoyo mutuo que las une a pesar de los caminos distintos que cada una ha elegido en la vida.