Con el objetivo de dar certeza jurídica a los propietarios de los llamados autos chocolate en México, el gobierno federal ha puesto en marcha un nuevo decreto que regula la importación definitiva de vehículos usados.
Publicado por la Secretaría de Economía en el Diario Oficial de la Federación (DOF), este programa tiene como meta ofrecer un marco legal que facilite la estancia y tenencia de vehículos de procedencia extranjera, muchos de los cuales circulan sin papeles en el país.
A través del “decreto por el que se regula la importación definitiva de vehículos usados,” el gobierno pretende asegurar que estos vehículos sean registrados adecuadamente en territorio nacional, protegiendo tanto a propietarios como a otros conductores.
La iniciativa surge en un contexto en el que un gran número de vehículos de segunda mano, principalmente provenientes de Estados Unidos, se introducen sin cumplir con los procesos de regularización adecuados.
Con este programa, las autoridades buscan que dichos autos cumplan con los estándares necesarios para circular de manera legal en México y la vigencia del programa será hasta el 4 de noviembre de 2025.
Aranceles y requisitos según el año-modelo
El nuevo decreto establece una tabla de aranceles basada en el año de fabricación del vehículo. Aquellos coches que tengan entre cinco y nueve años de antigüedad con respecto al año en curso podrán ser importados con un arancel del 1% sobre el valor total del automóvil.
Esto representa una oportunidad para quienes desean introducir un vehículo más reciente a México, ya que este tipo de autos tendrán un costo de importación significativamente menor en comparación con los autos más antiguos.
Por otro lado, los autos cuyo año-modelo sea de diez años o más antiguos respecto al año de importación tendrán un arancel mayor, correspondiente al 10% del valor del coche.
La medida se aplica a diversos tipos de vehículos, incluyendo automóviles de pasajeros, unidades para transporte de mercancías, tractores de carretera para semirremolques y camiones hormigonera.
Impulso a la legalidad en el sector vehicular
La intención del gobierno es regularizar estos vehículos para que puedan obtener su respectivo registro y placa mexicana, lo cual no solo beneficia a los propietarios, sino también al Estado, al incrementar la recaudación de impuestos y mejorar la seguridad vial.
Este tipo de autos, al ser formalmente reconocidos, podrán pasar por controles más rigurosos, reduciendo la probabilidad de involucrarse en situaciones de riesgo o en problemas legales para sus dueños.
El decreto es un paso significativo hacia la formalización de un sector que ha sido desregulado en México, en especial en las zonas fronterizas donde la presencia de “autos chocolate” es una realidad cotidiana.