En la noche del 31 de octubre, miles de motociclistas se congregaron en la Ciudad de México para llevar a cabo la tercera edición de la “Rodada del Terror”, un evento que combina disfraces y el rugir de motores. La caravana partió desde al menos doce alcaldías de la capital, con destino a la emblemática glorieta del Ángel de la Independencia, ubicada en la demarcación Cuauhtémoc.
El llamado a participar en la rodada fue ampliamente difundido a través de redes sociales, atrayendo a un gran número de entusiastas de las motocicletas. Sin embargo, el trayecto no estuvo exento de incidentes.
Durante el evento, se registraron disturbios en diversas vialidades, en primera instancia se reportó el incendio de una motocicleta en la alcaldía Tlalpan. Imágenes difundidas en las redes sociales muestran la moto consumida por las llamas, mientras algunos participantes observaban la escena. No obstante, no se reportaron heridos en este suceso.
En otro episodio, cerca de la avenida Xochimilco, un grupo de motociclistas asaltó y posteriormente agredió a un automovilista, ocasionando daños significativos a su vehículo. Este enfrentamiento se desató porque el conductor interfirió en la circulación de la caravana, lo que generó aún más tensión entre los participantes y otros usuarios de la vía.
Ante esta situación, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) implementó operativos de vigilancia y prevención en distintas áreas de la ciudad. En lugares como Fray Servando e Isabel la Católica, los elementos de seguridad se hicieron presentes para controlar la situación y mitigar otros posibles disturbios.
La SSC también emitió un mensaje claro a los motociclistas: el incumplimiento de las normas de tránsito podría resultar en sanciones severas, que incluyen multas y la posible remoción de las motocicletas al corralón.
Entre las regulaciones que se establecieron se encuentran:
- El uso obligatorio de casco tanto para el conductor como para el acompañante.
- La necesidad de tener toda la documentación en regla.
- La restricción de llevar menores de 12 años o más de dos pasajeros por unidad.
- Respetar los carriles confinados y el sentido de las calles.
- Cero tolerancia hacia maniobras peligrosas.
En caso de detectar acrobacias o comportamientos imprudentes, la SSC anunció la posibilidad de suspender la rodada, imponer multas que varían entre 10 y 30 Unidades de Medida y Actualización (UMA), e incluso remitir a los infractores ante el Juez Cívico o el Ministerio Público para casos más graves. No obstante, hasta el momento no se reportaron detenidos.