Florinda Meza es conocida por su personaje de “Doña Florinda” en la serie El chavo del 8 y como La Chimoltrufia en el programa Chespirito, lo que consolidó su presencia en la comedia mexicana. Sin embargo, su fortuna proviene de diversas fuentes, lo que le ha permitido mantener una estabilidad económica a lo largo de los años.
Su carrera inició en 1970 como actriz, pero 15 años después debutó como productora en la telenovela María de nadie, posteriormente se desarrolló en otras áreas y fue hasta la década de 1990 que su carrera vería un crecimiento importante luego de escribir y producir para la televisión.
Aunque participó en algunos proyectos para la pantalla chica como Mundo de juguete que era una producción de drama infantil y el melodrama La tierra, su popularidad alcanzó la cima al momento de interpretar su icónico personaje de Doña Florinda.
Fortuna y propiedades de Florinda Meza
Celebrity Networth, un sitio especializado en proporcionar estimaciones patrimoniales de celebridades basadas en análisis financieros y estudios de mercado, señala que la fortuna de Florinda Meza ronda los 20 millones de dólares, lo que equivale a 396 millones 879 mil 574 pesos.
Años atrás múltiples medios difundieron que su patrimonio neto rondaba esta cifra y la actriz mencionó que no vivía en el Pedregal o en Las Lomas, sino en una zona proletaria: la colonia del valle, misma que ha sido catalogada como uno de los vecindario con mejor calidad de vida de la Ciudad de México en 2014.
En una entrevista para el programa “Sale el sol” Florinda Meza mencionó que “ni vendiendo la casa en Ciudad de México y la de Cancún podría reunir $20 millones de dólares”.
La casa de Cancún
Este último hogar se puso a la venta en 2021 y su precio rondaba los 40 millones de pesos. De acuerdo con información de la inmobiliaria Berkshire Hathaway Cancún, la casa está ubicada en una de las zonas más exclusivas de Quintana Roo en un condominio residencial llamado Isla Dorada.
La antigua casa de Chespirito, Roberto Gómez Bolaños, tenía por nombre Villa Florinda y esta se encuentra en la zona hotelera de Cancún.
Según la misma inmobiliaria, entre las amenidades que disfrutan los residentes de este lugar están algunas avenidas internas, canales náuticos, extensas áreas jardineadas, spa de lujo, canchas de tenis, paddle, alberca y snack bar. En la zona también cuentan con seguridad las 24 horas del día.
La vivienda es de tres pisos, cuenta con 7 habitaciones y baños completos, 2 medios baños pero además tiene una casa adicional de servicio para huéspedes. También tiene áreas para socializar.
Su arquitectura se basa principalmente en el estilo neo clásico hispano mexicano, que de acuerdo con Architectural Digest (AD), un medio especializado en diseño de interiores, se caracteriza por tener una referencia directa a la estética grecorromana.
México Design señala que a esta corriente la preceden etapas que sucedieron en diferentes periodos; la primera fue durante el virreinato, a finales del siglo XVIII y la segunda surgió debido a los cambios políticos de la época.
En la propiedad se puede observar la simplificación de las líneas, la búsqueda por la razón compositiva y destaca el uso de los órdenes griegos, en especial el jónico y el dórico.
Los contrastes volumétricos no predominan en el hogar, pues en esta corriente se tiene preferencia por la simetría y en la fachada predomina el color blanco en contraste con el color anaranjado de las tejas.
El inmueble cuenta con 1,060 metros cuadrados construidos en un terreno de más de 1,356 metros cuadrados y de acuerdo con Berkshire Hathaway Cancún la planta baja está a desnivel, tiene despacho, baño y medio, sala de estar, estancia, antecomedor, comedor, cocina, cuarto de lavado y una terraza con jardín.
En el segundo nivel hay dos habitaciones con baño y vestidor completos, se encuentra la recámara principal que tiene sala de estar, televisión, baño completo con vestidor, estudio de pintura y una terraza con vista al jardín.
El tercer nivel cuenta con amenidades similares a las del piso inferior sólo que destaca por tener una terraza con vista panorámica hacia los canales con los que cuenta la zona residencial.