La Noche de Ánimas y el Día de Muertos son de las celebraciones que llenan de color a Michoacán en los primeros días de noviembre, y aunque los visitantes puedan pensar que ambas son lo mismo, en realidad tienen matices y actividades distintivas pese a estar relacionadas con las tradiciones de los fieles difuntos.
La Noche de Ánimas es una tradición purépecha que se realiza en la noche del 1 al 2 de noviembre en las comunidades de Pátzcuaro, cuando se iluminan los cementerios junto al lago con velas, mientras los pobladores realizan vigilias junto a las tumbas de sus seres queridos.
Es una noche de recogimiento y reuniones familiares, en la que se espera el regreso de las almas de los difuntos.
Contrario a lo que muchos creen, los purépechas no celebran la muerte, sino la vida después de esta, y aprovechan esta festividad para reunirse una vez al año con quienes han partido. Las familias se congregan para compartir alimentos con sus seres queridos que regresan del más allá.
El Día de Muertos, el 2 de noviembre, es la culminación de esta festividad y se parece a las tradiciones del resto del país, pues se colocan altares con ofrendas en honor a los fallecidos, incluyendo alimentos, bebidas, flores de cempasúchil y objetos significativos para ellos.
En esta fecha se celebra la memoria de los seres queridos, con una mezcla de solemnidad y festividad, preservando las tradiciones indígenas y la identidad cultural de la región.
Invitan a disfrutar las tradiciones de Michoacán
Pátzcuaro, en el estado de Michoacán, se prepara para recibir a miles de visitantes durante las festividades de la “Noche de Ánimas” y el “Día de Muertos”, que se celebrarán del 29 de octubre al 2 de noviembre.
La diputada Vanessa López Carrillo del Partido del Trabajo (PT) extendió una invitación a turistas nacionales e internacionales para participar en estas celebraciones, que son un pilar de la tradición purépecha y un motivo de orgullo para la región.
Acompañada por los presidentes municipales de Pátzcuaro, Tzintzuntzan, Taretan y Tacámbaro, López Carrillo destacó la importancia cultural y económica de estas festividades. Se espera una derrama económica superior a los 350 millones de pesos en los municipios de la Rivera del Lago, que incluyen a Santa Clara del Cobre, Tzintzuntzan, Erongarícuaro, Quiroga y Pátzcuaro.
Durante la rueda de prensa, el presidente municipal de Pátzcuaro, Julio Arreola, explicó que las festividades comienzan el 31 de octubre con la llegada de las ánimas de los niños y continúan el 1 de noviembre con la de los adultos. Las tumbas se adornan con flores de cempasúchil y en las casas se levantan altares que representan el inframundo, el mundo actual y el mundo superior.
Por su parte, el presidente municipal de Tacámbaro, Salvador Bastida, mencionó que en su localidad se construye anualmente el altar a los muertos más grande de Michoacán, junto con una réplica del Edículo del Santo Sepulcro. Mientras tanto, el presidente municipal de Taretan, Francisco Venera, invitó a vivir la experiencia en persona, destacando la producción local de caña y guayaba.
Estas festividades no solo son un homenaje a los difuntos, sino también una oportunidad para disfrutar de actividades culturales, turísticas y recreativas que reflejan la riqueza de la cultura michoacana. La diputada concluyó que quienes experimentan la “Noche de Ánimas” y el “Día de Muertos” en Michoacán quedan cautivados por la experiencia y sienten el deseo de regresar.