Durante casi una década, el Ejército Mexicano tuvo en la mira a Edwin Antonio Rubio López, alias ‘El Max’, ‘El Oso’ o ‘Cabo 100′. Lo cazaban por sus operaciones en Baja California, pero fue detenido en Culiacán, Sinaloa, tras un violento enfrentamiento el pasado 21 de octubre.
Aunque había mantenido un perfil discreto en comparación con otros jefes criminales, ‘El Max’ fue públicamente señalado en 2022 como un generador de violencia de alta relevancia dentro de las filas del Cártel de Sinaloa, específicamente en la facción alineada con Ismael ‘El Mayo’ Zambada.
Cuando la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) confirmó su captura —luego de una confrontación que dejó 19 civiles abatidos—, varios reportes extraoficiales señalaron a ‘El Max’ como el personaje referido en el corrido Un joven con talento, interpretado por Luis R. Conriquez.
“Para este negocio hay que tener cerebro. Mano dura al enemigo, me porto violento, buen amigo con aquel que está desde el comienzo”, puede escucharse en los primeros segundos de la composición del músico nacido en Caborca, Sonora.
En el tema, Luis R. Conriquez narra algunos pasajes de la trayectoria criminal de ‘El Max’ e incluso menciona a varios jefes del Cártel de Sinaloa que serían cercanos a él.
“Acá por Tijuana me la navego, la sombra que cargo es la del sombrero, a los dos hermanos mucho les debo, si estamos aquí parados es por ellos”, versa un fragmento de la canción.
Cabe señalar que ‘El Señor del Sombrero’ es uno de los alias más reconocidos de Ismael Zambada García. La organización criminal que hoy dirige su hijo, Ismael Zambada Sicairos, ha adoptado el sombrero como su emblema.
Además, “los dos hermanos” podría ser una referencia a Alfonso (’El Aquiles’) y René (’La Rana’) Arzate García, líderes de la célula conocida como Los Arzate de la cual, aparentemente, ‘El Max’ formaba parte.
En otra parte del corrido se menciona que ‘El Max’ tenía a su cargo células de sicarios para las incursiones bélicas del cártel:
“Yo no soy de problemas, pero si hay problemas le damos de frente. En una blindada me miran pasar, son protocolos que hay que respetar. Traigo a varios cholos, encortados van, un bolón de morros listos pa’ pelear”.
Hacia el final de la canción hay referencias a jefes delictivos como ‘Cabo 50′, ‘Cabo 30′ y ‘El Cabezón’, también ubicados en 2022 como objetivos prioritarios para la Sedena en Baja California.
‘Cabo 50′ es un alias atribuido a Israel Alejandro Vázquez, conocido igualmente como ‘El Goofy’. Investigaciones publicadas por Zeta Tijuana señalan que la trayectoria criminal de este sujeto puede rastrearse hasta 2003 y contaría con antecedentes penales tanto en Baja California como en Sinaloa.
Rodolfo Sánchez Arellano, alias ‘Cabo 30′, también fue señalado públicamente por mandos de la Segunda Región Militar como uno de los principales generadores de violencia en el estado fronterizo.
Por su parte, ‘El Cabezón’ es uno de los muchos seudónimos con los que ha sido identificado Jesús Rafael Yocupicio, un cabecilla al servicio de Los Mayos que ha pasado por varios cárteles durante su carrera delictiva.
‘El Cabezón’ o ‘Cabo 27′ era miembro del Cártel de los Arellano Félix. Posteriormente, por motivos desconocidos, se integró al Cártel de Sinaloa y en 2015 se sumó a las filas del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Al igual que ‘El Cabezón’, Rodolfo Sánchez e Israel Vázquez han sido ubicados como exintegrantes del cártel de las cuatro letras que, en años recientes, cambiaron de bando para enlistarse en la facción conocida como La Mayiza.
“Saludos, compadre Cabezón y toda su gente, si ocupan apoyo saben que estoy al pendiente. Soy ‘El Max’ y acá en Tijuana me han mirado siempre”, son los versos finales del corrido.