Cuatro personas fueron detenidas en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California, luego de que autoridades locales desplegaran un operativo en un inmueble que había sido habilitado como un “minicasino”, en el cual supuestamente se realizaban actividades ilícitas.
A través de una denuncia anónima, elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM) —de la Agencia de Investigación Criminal— tuvieron conocimiento de un establecimiento ubicado en la colonia Las Torres, en el cual ingresaban personas armadas para cometer actividades ilícitas.
Por lo anterior, el Ministerio Público Federal (MPF) solicitó un cateo ante el juez para inspeccionar el sitio referido y así corroborar los reportes ciudadanos. Fue así como los agentes de ministeriales se trasladaron al inmueble procedieron a realizar las diligencias correspondientes, tras las cuales lograron detener a cuatro sujetos.
Durante estas acciones, los uniformados localizaron 13 máquinas tragamonedas , cuyas ganancias presuntamente iban dirigidas a los integrantes de una agrupación criminal con operaciones en Tijuana. Es por ello que en el sitio también se encontraron 14 cartuchos útiles y un arma de fuego.
Asimismo, los elementos de la AIC localizaron 261 mil dólares en efectivo y 14 mil 500 pesos en moneda nacional. En las imágenes compartidas por la Fiscalía General de la República (FGR) se observa que la denominación de la mayoría de los billetes era de 100 dólares.
“El inmueble, los detenidos y lo asegurado fueron puestos a disposición del MPF, quien integra la carpeta de investigación correspondiente”, detalló la FGR a través de un comunicado compartido en la tarde del sábado 19 de octubre.
Si bien las autoridades indicaron que el establecimiento era usado para cometer actividades ilícitas, no mencionaron el nombre del grupo criminal que operaba el ‘minicasino’. Será conforme al avance de las indagatorias como se determina el tipo de delitos que se realizaban en el inmueble.
De acuerdo con la Dirección General de Juegos y Sorteos, las máquinas tragamonedas deben tener la autorización de la Secretaría de Gobernación para poder operar, toda vez que este tipo de negocios están relacionados con el crimen organizado, por lo que son considerados ilegales.
“Las máquinas tragamonedas prohibidas por la ley son una fuente de corrupción de menores, su uso no es un juego, es una adicción que abre la puerta a la delincuencia. Tenemos información de que detrás del uso e instalación de este tipo de máquinas existe una amplia red de delincuencia organizada”, advierte un informe de la Dirección de Juegos y Sorteos.
En el estado de Michoacán, localizado en el occidente de México, las autoridades han identificado que el grupo criminal “Los Viagras” manejan este tipo de negocios. Se estima que cada máquina tiene un valor de entre 15 mil y 38 mil pesos, y genera unas ganancias de 12 mil pesos al mes, aproximadamente.
Los minicasinos de Los Viagras se han localizado en municipios como Apatzingán, Buenavista Tomatlán, Santa Ana Amatlán y Pinzándaro.