La llegada del internet y la globalización ha provocado un choque cultural y semántico entre usuarios de países hispanohablantes y hoy en día, existen algunas controversias debido a la gran variedad de recetas que reciben nombres diferentes según las costumbres de cada región.
Asimismo la gran variedad de recetas en la repostería internacional y sus respectivas traducciones no han ayudado a responder concretamente las diferencias entre los términos, pues aunque en algunos países de Sudamérica el argot popular les da la misma definición a las mismas recetas.
Sin embargo, en el caso de la repostería mexicana si existen algunas diferencias en la preparación del bizcocho, el pastel y la tarta que pueden influir a la hora de elegir postre u otro.
Las principales diferencias entre los tres postres horneados
Pastel
Es quizá el término más común para referirse al postre de harina horneado, la definición de la Real Academia Española es “masa de harina y manteca, cocida al horno, en que ordinariamente se envuelve crema o dulce, y a veces carne, fruta o pescado” y aunque en el diccionario de sinónimos aparecen aparecen bizcocho y tarta, el pastel se diferencia principalmente por poder prepararse con ingredientes salados como carne y frijoles.
Bizcocho
Este término es más común en España para referirse a bocadillos individuales, la definición principal de la RAE es “Dulce blando y esponjoso, hecho generalmente con harina, huevos y azúcar, que se cuece en el horno”.
Según el libro “Elaboraciones básicas de repostería y postres elementales” del repostero Juan Matías del Moral Garrido, los bizcochos se suelen clasificar en tres categorías: los pesados son los que contienen mantequilla, aceite o alguna otra grasa, por lo que requieren una cocción más suave y prolongada en el horno; los bizcochos ligeros, en cambio, no incluyen lípidos; y en tercer lugar los superligeros, que apenas necesitan tiempo en el horno, no tienen nada de grasa, muy poca harina o a veces almidón.
En México, el bizcocho se caracteriza por prepararse de una forma sencilla compuesta únicamente por huevos y harina, en ocasiones polvo de hornear. Esta mezcla se caracteriza por su esponjosidad y por hornearse al momento.
Tarta
Su definición del diccionario de la RAE es la más confusa pues la define como “pastel grande, de forma generalmente redonda, relleno de frutas, crema, etc., o bien de bizcocho, pasta de almendra y otras clases de masa homogénea”.
Sin embargo, la tarta en México es el postre que más se diferencia de los otros dos, pues las tartas mexicanas se caracterizan por tener una base de masa (como una corteza) y se rellena con cremas, frutas o dulces.
El origen del pastel de cumpleaños
La idea de un pan dulce familiar tiene su origen en la antigua Grecia, donde se dice que surgió la idea del “pastel de cumpleaños”.
Según explica la revista Muy Interesante, dentro del folclore griego se tenía la tradición de ofrecer una tarta de miel adornada para Artemisa, la diosa de la caza, donde los sacerdotes soplaban velas sobre la tarta con la intención de que el humo suba sus deseos al cielo y se cumplieran.
Además, el término pastel proviene del griego “pasté”, que se refiere a una mezcla de salsa y harina.