“Se están reuniendo a través del secretario de Relaciones Exteriores que fue lo que planteamos, ya tuvieron una reunión, han tenido varias reuniones, me decían que además es una norma establecida en la relación con cualquier país y en particular con Estados Unidos”, respondió la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo acerca de la ‘despausada’ en la relación del Gobierno de México con el embajador de Estados Unidos en nuestro país, Ken Salazar.
“Quien coordina esa relación es el secretario de Relaciones Exteriores, entonces si se quiere hablar con el secretario de Trabajo, pues a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores se dice queremos del trabajo sobre el tema del tratado y otros temas y con gusto se reúnen ambos países”, refirió.
La mandataria destacó que su gobierno se apegó a un estatuto establecido y eliminó de tajo la interlocución, la línea directa que gozaba el embajador estadounidense con el presidente en turno.
Hace unos días la titular del Ejecutivo habló que habría una redefinición en los lineamientos en la relación con el embajador del vecino país, lo cual hoy reiteró al apegarse a lo establecido.
El origen de todo
“El debate sobre la elección directa popular de jueces en estos tiempos, así como la política feroz que se va a ver en México, si se llegara a aprobar las elecciones de jueces en el 2025 y 2027 amenazan la histórica relación comercial que hemos construido, la cual depende de la confianza de la inversiones que se tienen que hacer aquí en México para lograr la prosperidad del pueblo de México”, declaró el diplomático el 22 de agosto.
Cabe recordar que el embajador opinó sobre la Reforma Judicial, previo a su aprobación, “Si no se hace bien, puede traer muchísimo daño”, lo que generó molestia al entonces presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien reprochó fuertemente sus comentarios y consideró sus palabras como un acto prepotente e injerencista, así como una violación a nuestra soberanía en la mañanera del 27 de agosto.
De igual modo indicó que no iba a permitir ningún tipo de intromisión en la política interna del país, “No vamos a someternos a ninguna potencia extranjera”, además de una nota de protesta que envió su gobierno a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a la embajada de EEUU, para oficializar su reclamo.
Hasta antes de sus críticas Salazar entraba y salía de Palacio Nacional sin problema alguno, pero a partir de ese momento, AMLO estableció una ‘pausa’ con él misma que ya fue ‘despausada’ pero conforme a los estatutos; todo será a través del canciller Juan Ramón de la Fuente.