Esta mañana se reportó el hallazgo sin vida de Clemente Gómez Gómez, el exalcalde de San Andrés Duraznal, Chipas, que había dejado el cargo apenas un par de semanas atrás.
Los primeros reportes indicaron que el cuerpo del expresidente municipal se encontró a las orillas del río Acapulquito, justo en el tramo carretero que conecta a la cabecera municipal con el ejido de La Competencia.
Versiones preliminares apuntaron a ahogamiento como la posible causa de la muerte; sin embargo, de manera extraoficial se reportó que Clemente Gómez presentaba huellas de tortura y varias heridas producidas por impactos de arma de fuego, por lo que se apuntó a un homicidio doloso.
La información con la que se cuenta hasta el momento es que fueron los habitantes de la región quienes dieron aviso a las autoridades; posteriormente arribaron al lugar personal de la Policía Estatal y Municipal, así como peritos de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) y del Ejército Mexicano para acordonar el lugar.
Como antecedente de este crimen se tiene, además de la ola de violencia que azota a gran parte de Chiapas, los índices de violencia electoral que golpearon a la entidad en el pasado procedo 2023-2024 y el asesinato en 2021 del hermano de Clemente Gómez.
Chiapas a la cabeza de la violencia política
En el marco de las elecciones federales del pasado 2 de junio, la organización Proceso Electoral identificó al estado de Chiapas como el más violento para los aspirantes y candidatos a cargos de elección popular.
De acuerdo con la información de la organización civil, los municipios más afectados fueron Mapastepec (7 crímenes), La Concordia (6), Benemérito de Las Américas (2), San Juan Chamula (2) y Juárez (2); después de Chiapas, las entidades más violentas fueron Michoacán, Guerrero, Veracruz, Morelos y el Estado de México.
Derivado de esta violencia política, el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IPEC) decidió cancelar los comicios en Pantelhó y Chenalhó, dos regiones en disputa por grupos criminales que pelean por el control criminal de Los Altos de Chiapas.
Después de las elecciones, Chiapas dejó el primer puesto de violencia política a Guerrero, pues según información de la organización Data Cívica, en lo que va del presente año la entidad gobernada por Evelyn Salgado suma 60 agresiones (entre asesinatos, ataques armados, secuestros y atentados); le siguen Chiapas (55), Puebla (49), Guanajuato (46) Morelos (33).
Conviene recordar que el pasado 6 de octubre fue asesinado Alejandro Arcos Catalán, el alcalde electo de Chilpancingo, Guerrero, que tenía apenas seis días en el cargo. Sus asesinos le cortaron la cabeza y la dejaron sobre un auto; su cuerpo, estaba en el asiento del copiloto.